El hijo del exlíder libio Muamar al Gadafi, Saif al Islam, reclamado por la Corte Penal Internacional (CPI), permanece en territorio de Libia, aseguró en Pretoria el presidente de Níger, Mahamadu Isufu.
Isufu indicó que Saif se encuentra "en algún lugar cercano a la frontera de Níger o Algeria", y no en Níger, como apuntaron distintas informaciones a finales del mes de octubre.
La CPI acusa al hijo de Gadafi de crímenes de lesa humanidad por su respuesta a las revueltas de los insurgentes el pasado febrero.
El presidente de Níger, que se encuentra en Sudáfrica en una visita de trabajo para entrevistarse con su homólogo sudafricano, Jacob Zuma, afirmó que Saif al Islam será acogido "como un refugiado más", en el caso de que cruce la frontera desde Libia.
"Tenemos obligación de recibirlos por razones humanitarias, como ha ocurrido con Sadí Gadafi (otro hijo del exlíder libio), aunque no se les permitirá llevar a cabo acciones políticas", afirmó Isufu en una rueda de prensa en Pretoria.
Respecto a si Níger entregaría a Saif al Islam a la Corte Penal Internacional, el jefe de Estado nigerino se limitó a decir que su país "obrará de acuerdo a los fundamentos democráticos, sus leyes y al derecho internacional".
Además, el mandatario nigerino mostró su preocupación por la inestabilidad en el Sahel (región del Sahara que comparten Argelia, Mali, Mauritania y Níger) tras la guerra de Libia, que ha diseminado un importante arsenal militar en la zona.
"El Sahara está amenazado por el terrorismo integrista y las bandas de traficantes de armas, drogas y personas", explicó Isufu, que alertó de un aumento de esas actividades en la frontera Libia, en la que se refugian antiguos seguidores de Gadafi.
El pasado miércoles, recordó, el Ejército de Níger asaltó un convoy de doce coches cargados con "una importante cantidad de armas" procedente de Libia.
Seis de los traficantes fueron abatidos y otros trece fueron apresados y están siendo interrogados.
Las autoridades de Níger siguen investigando el destino del cargamento y la nacionalidad de los traficantes, agregó Isufu.
Pese a la inestabilidad en la región, el presidente de Níger rechazó la intervención de una fuerza internacional y aseguró que el Ejército, junto a las contingentes de los países vecinos, están en condiciones de controlar la situación.
El Sahel se ha convertido en los últimos tiempos en uno de los principales bastiones de guerrillas islamistas cercanas a Al Qaeda. Isufu analizó con Zuma la situación de inseguridad en la zona, así como posibles vías para mejorar las condiciones de vida en la región, caldo de cultivo del integrismo islámico.
EFE