Las infecciones respiratorias agudas son patologías que afectan el tracto respiratorio, desde las fosas nasales, senos paranasales y oídos, hasta los pulmones y representan 68% de las consultas médicas en el país. Afectan a personas de todas las edades, pero principalmente a niños pequeños y a adultos mayores.
Entre las causas de estas infecciones se encuentran principalmente los virus (80-95%) y con menos frecuencia las bacterias, que se asocian a variaciones climatológicas que facilitan la transmisión de virus y bacterias entre las personas, con aparición de epidemias. También la desnutrición, el tabaquismo pasivo, el uso inadecuado de antibióticos, la exposición continua a ciertos agentes y la contaminación atmosférica e industrial, son causales de las infecciones respiratorias agudas.
Comúnmente los síntomas comienzan en la vía aérea superior, desde rinorrea (secreción nasal) hialina o mucopurulenta anterior, estornudos frecuentes, goteo postnasal (secreción que baja por la parte posterior de la garganta), tos húmeda recurrente, episodios de fiebre de 38-39°C, odinofagia (dolor de garganta al tragar) e incluso los síntomas pueden comprometer la vía aérea inferior con signos marcados de dificultad respiratoria, con dolor en el tórax y presencia de sibilancias, que es el sonido que hace el aire al pasar por las vías respiratorias congestionadas.
Sin embargo, hay síntomas de alarma que indican que el paciente debe recibir atención médica inmediata: dificultad respiratoria progresiva que conlleve a una insuficiencia respiratoria aguda, fiebre de difícil manejo, afectación del estado de conciencia tipo somnolencia, palidez y cianosis peribucal (coloración púrpura azuladaen los labios, causada por alteración del intercambio de oxígeno en los pulmones y por exceso de dióxido de carbono en la sangre).
¿Cómo prevenir el contagio de las infecciones respiratorias agudas?
La higiene juega un papel sumamente importante en la prevención de las infecciones respiratorias agudas. El correcto lavado de manos es el primer paso, toser y estornudar con un pañuelo descartable o en el pliegue del codo, son otras medidas que podemos tomar para evitar el contagio.
Hay que tomar en cuenta que los gérmenes pueden permanecer sobre la piel aproximadamente 30 minutos y sobre los objetos, hasta 5 horas. De igual manera es conveniente evitar los lugares cerrados, porque los microbios se propaganfácilmente, así como evitar el humo del cigarrillo y el uso de ventiladores.
Por otra parte el uso de los inmunoestimulantes o lisados bacterianos ayudan en la prevención de infecciones respiratorias recurrentes, pues han resultado de gran ayuda al reforzamiento de la inmunidad de tipo adquirida; se hace referencia a un estudio realizado por Dra. Ana Koatz, especialista en alergia e inmunología, expresidente de la Asociación de Alergia, Asma e Inmunología en “Buenos Aires” (AAIBA); en el que se seleccionan pacientes con patologías respiratorias crónicas tipo rinitis alérgica, asma, y EPOC, donde su uso ha disminuido de manera significativa las exacerbaciones de la patología de base, con menor riesgo en la adquisición de enfermedades respiratorias.
El uso de inmunomuduladores bacterianos como tratamiento preventivo de infecciones recurrentes potencia el estado inmunológico del individuo. Estos medicamentos serán indicados de acuerdo al criterio de su médico.
Se recomienda la lactancia materna durante el primer año de vida del bebé, pues potencia el estado inmunológico del niño. Igualmente seguir a cabalidad el calendario de vacunaciones de manera preventiva.
La prevención en infecciones respiratorias agudas, incluye concientizar a la comunidad sobre las medidas de promoción de la salud.
Esta es una campaña que forma parte del compromiso social empresarial de Laboratorios Leti S.A.V.