El papa Francisco mostró de nuevo su preocupación por el cambio climático y sugiere a los líderes que se reunirán en la cumbre de París que actúen, porque -advierte- el mundo está "al borde de un suicidio".
En su vuelo de regreso a Roma desde África, el Sumo Pontífice aseguró que "desde la primera conferencia en Tokio, cada año los problemas se han vuelto más graves".
El papa, que recordó el peligro ecológico asociado al derretimiento de los glaciares y al aumento del nivel de los océanos, se mostró, no obstante, esperanzado.
"Tengo confianza que estas personas van a hacer algo y voy a orar por esto".
La Cumbre del Clima busca articular una cooperación global en la lucha contra el cambio climático.
Unos 166 países que representan alrededor del 90% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero han presentado sus planes de acción. La COP21 será una de las mayores conferencias jamás organizadas por el Gobierno francés.RT