La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) acogió con beneplácito el anuncio este martes del gobierno de Tailandia de que más de 18.000 personas han recibido la nacionalidad en los últimos 3 años. La agencia consideró esto como un importante paso en su campaña para acabar con este flagelo para 2024.
Actualmente, el número de personas apátridas en Tailandia asciende a 443.862. Muchas de ellas pertenecen a tribus que viven en áreas remotas o fronterizas y suelen tener poco acceso a información sobre sus derechos y el proceso de nacionalización.
Sin nacionalidad, muchos aseguran que no pueden ejercer plenamente sus derechos, como tener propiedades, viajar, votar o acceder a servicios básicos como la atención médica o la educación. Muchos de estos desafíos están detallados en un reciente informe de ACNUR sobre los impactos de la apatridia en los niños y en los jóvenes.
En declaraciones a Radio ONU, William Spindler, portavoz de ACNUR, explicó que el programa de Tailandia está sirviendo de modelo para otros países que lidian con este problema.
"Tailandia es uno de los países que más ha hecho para erradicar y disminuir la apatridia. Hay una serie de países en Europa, en África, en Asia y América Latina que están trabajando para tratar de reproducir esto", aseguró.
En los últimos años, ACNUR ha colaborado con las autoridades para alcanzar a las comunidades afectadas y poner a su disposición el procedimiento de solicitud de la nacionalidad.
La ONU calcula que en el mundo sigue habiendo 10 millones de apátridas.