Ensayos clínicos para problemas de salud reales
Dar respuestas a problemas reales de salud de la población y trasladar los resultados de los ensayos clínicos para que tengan un beneficio sobre el paciente es el objetivo de la investigación clínica independiente. "No se trata de investigar por investigar; la investigación no es un fin en sí mismo, sino que los resultados de los ensayos clínicos tienen que tener un impacto real en los pacientes, es decir, en todos y cada uno de nosotros", asegura Joaquín Casariego, director del Consorcio de Apoyo a la Investigación Biomédica en Red (CAIBER) que ha presentado el primer Plan Clínico de Investigación en Ensayos Clínicos de España, una iniciativa pionera en Europa cuyo objetivo es proporcionar a los investigadores la financiación y las herramientas metodológicas necesarias para que desarrollen con éxito sus de investigación independiente.
CAIBER apoyará el desarrollo de 46 estudios de "excelencia científica" considerados de alta prioridad tras la evaluación científica y estratégica, ocupándose de la coordinación, gestión administrativa y operativa a través de sus infraestructuras y los 200 profesionales de soporte a la investigación con los que cuenta, favoreciendo que el investigador principal sea quien asuma plenamente el liderazgo científico y garantizando que el ensayo clínico se realiza según los más elevados estándares de calidad y en el menor tiempo posible. "El impacto sobre el paciente del ensayo clínico y la aplicabilidad de los resultados han sido dos variables determinantes a la hora de evaluar los proyectos", señala.
Poco frecuente
La investigación clínica independiente es una "rara avis" en la investigación médica. La carga de la investigación en el desarrollo de nuevos medicamentos la lleva la industria farmacéutica. Debido al coste y a los riesgos que ello supone ninguna administración estatal ni institución académica podría siquiera plantearse el desarrollo clínico de medicamentos. Sin embargo, este tipo de investigación no se plantea a menudo problemas reales de salud en los que no existe, al menos aparentemente, un beneficio.
La investigación independiente trata, dice Casariego, de que los ensayos clínicos ofrezcan respuestas a problemas reales, "y con ello no quiero decir que la industria farmacéutica no se plantee estos fines en sus ensayos". Para el director del CAIBER, "es un ejercicio básico de responsabilidad, antes de dar siquiera un paso, el responder a esta pregunta: de entre todo lo que podríamos investigar, ¿qué es lo más urgente y prioritario para los pacientes y que debemos acometer en primer lugar?" La Política Científica de CAIBER se ha definido atendiendo a esta premisa básica, y para ello, subraya, hemos considerado imprescindible contar con todas las perspectivas posibles para identificar las líneas de investigación en que queremos embarcarnos.
Prematuros y atención primaria
Así, por ejemplo, entre los estudios seleccionados por CAIBER, se van a investigar "opciones terapéuticas para los niños gran prematuros con oxígeno; la eficacia de la cirugía bariátrica en pacientes con diabetes tipo 2; la efectividad del páncreas artificial en diabetes tipo 1, o un proyecto de salud cardiovascular en atención primaria".
Estos 46 proyectos de excelencia abordan cuestiones de salud prioritarias en 16 especialidades médicas, entre las que destacan la pediatría, oncología, nefrología, cardiología, respiratorias e infecciosas. En cuanto a la distribución geográfica de los proyectos seleccionados, si bien es cierto que Cataluña y Madrid siguen teniendo un peso importante, prácticamente todos las Comunidades Autónomas estás incluidas, destacando el País Vasco, Andalucía, Comunidad Valenciana o Murcia.
Ante un escenario de crisis económica, Casariego señala que la investigación clínica necesita mucha colaboración y "vamos a salir a buscarla a través de un programa de captación de fondos públicos y privados".
ABC
