“De darse un cambio de Gobierno, cosa que no va a pasar, la reconciliación con el imperio y la OEA será un hecho; eso será una relación muy cordial y amorosa”, dijo de forma contundente el embajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, quien conversó desde Bolivia en exclusiva con Noticias24, donde se desarrolla la 42 Asamblea General de dicha Organización.
Varios fueron los temas abordados: la OEA, la denuncia de varios convenios, entre ellos la Convención Interamericana de Derechos Humanos, el papel de Venezuela ante el mundo y, claro está el panorama electoral de cara al 7 de octubre.
Así, el Embajador y también miembro del Consejo de Estado de Venezuela, ahondó en detalles interesantes como la situación del país ante la OEA y el nuevo orden mundial: “EE UU no puede convivir con la izquierda, no aceptan democracias disidentes, por eso siempre han sido determinantes en la OEA”.
En este sentido, su análisis se basa en la mano fuerte del Estados Unidos en el orden Latinoamericano, algo denunciado además en diversas oportunidades por varios Gobiernos mundiales. Desde este punto de vista y teniendo en cuenta las denuncias que le Gobierno Nacional hace hacia los sectores de oposición, quienes supuestamente están íntimamente ligados con “el imperio”, Chaderton asegura que de haber un cambio en la silla presidencial se daría “una reconciliación con el imperio que nos agrede”.
“Si usted es de Globovisión y llama de la Cidh con una queja del Gobierno Nacional, inmediatamente sacan un comunicado, pero 6 años después del Caracazo es que comenzaron a ocuparse del problema”, denunció. Pero esta no es la primera vez que el Embajador tiene algo que decir al respecto.
Por ejemplo, a principios del mes de mayo, Chaderton aseguró que “en Venezuela no existe la cadena perpetua, por ende vamos vía a liberarnos de otro instrumento que sirve para la dictadura imperial que sufría nuestra patria, como lo es el sistema interamericano de derechos humanos”.
Según el representante de Venezuela, Estados Unidos “continúa haciendo buenos negocios en Venezuela, pero no son amigos de la libertad de expresión. En EE UU la gente no se da cuenta porque están embelesados con la propaganda, la televisión y los medios están controlados por grandes corporaciones. Que alguien como Chávez se pare y los enfrente, no lo toleran”, indicó.
El país: “Mientras el Presidente va subiendo y subiendo, el otro candidato va en cuesta abajo”
Estando en pleno año electoral y a escasos meses de que se decida el futuro del país, el tema se vuelve, sin duda, más relevante. Los discursos, mensajes y promesas están a la orden del día y en este contexto, Chaderton aseguró que desde su perspectiva, la situación del país la ve “muy bien”.
“Yo veo la situación política del país muy bien, porque mientras el Presidente va subiendo y subiendo, el otro candidato va en cuesta abajo“, comentó entre risas. Pero más allá de lo que digan las cifras, ¿es posible que haya otro líder que no sea Hugo Chávez? Para el Embajador, la respuesta amerita una explicación que se enmarca en la vía democrática: “Los pueblos eligen los momentos y paren a sus líderes y por supuesto que puede haber otro líder, pero tiene que ganar las elecciones en primer lugar. Si el pueblo decide que una y otra vez que sea Chávez será Chávez, pero si quiere que sea el Conde será el Conde”.
Además, analizó la forma de hacer política actualmente, en relación a los discursos y la falta de diplomacia en alguna intervenciones, cuestión que atribuye a la falta de confianza generada por la participación de sectores de la oposición en el golpe de Estado del 2002: “Más allá de las posibilidades de rectificación, de la cual no estoy muy seguro, eso ha generado una desconfianza que amerita llevar con mucho cuidado la relación”.
Capriles Radonski: la anécdota
Chaderton no dudó en referirse al candidato por la Mesa de la Unidad, Henrique Capriles Radosnki, pero lo hizo con una anécdota: recordó aquel momento en que el fue Embajador ante Colombia, cuando el entonces Alcalde de Baruta visitó Colombia.
“En un almuerzo que le ofrecí, le comenté que no me habían cobrado aún el derecho de frente, viviendo yo en Baruta (…) él me dijo que no me preocupara que estaban sistematizando la Alcaldía”, relató. Tiempo después, aún no se le había pasado factura alguna y siendo ya Chaderton Canciller “llegó una declaración de Capriles que me acusaba de no pagar mis impuestos y no dar el ejemplo (…) ya se imaginará usted la idea que tengo de la seriedad de Capriles”.
Consejo de Estado: niega que sea un Consejo de Transición
“El Consejo de Estado no se ha constituido completamente como tal, pero mientras tanto hay los malos deseos de quienes esperan que el Presidente no pueda presentarse por motivos de salud, pero lo cierto es que esto es sólo un mecanismo para prestar apoyo al Gobierno”, aseguró de manera enfática al momento de conversar sobre la creación del Consejo de Estado, del cual él es parte.
Esto a propósito de las críticas generadas al momento de la conformación. Recordemos que hubo quienes indicaban que el Consejo era más que un grupo de apoyo, mientras otros aseguraban que era una muestra de debilidad.
El Tiar
Este martes de conocía que Venezuela había tomado la decisión de retirarse del Tiar, siglas del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca o como se conoce, el Tratado de Río que no es más que un pacto de defensa mutua firmado en 1947.
Esta decisión fue bien recibida por Chaderton quien aseguró ya se había preguntado cuándo Venezuela iba a abandonar este convenio: “Estábamos casados con un dinosaurio y como esas relaciones de pareja donde el sufrimiento se hace interminable, tomamos la decisión de terminar”.
Según el artículo 3, numeral 1, en caso de “(…) un ataque armado por cualquier Estado contra un Estado Americano, será considerado como un ataque contra todos los Estados Americanos, y en consecuencia, cada una de las Partes Contratantes se compromete a ayudar a hacer frente al ataque en ejercicio del derecho inmanente de legítima defensa individual o colectiva que reconoce el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”.
Según el diplomático, “no tiene sentido estar en un convenio creado en 1947 para agresiones soviéticas” donde “la única ocasión en la que hubo una agresión extracontinental fue cuando los británicos agredieron a Argentina con motivo de la Guerra de las Malvinas donde además, la OEA hizo un papel ridículo porque se pronunció 7 meses después”.
A pesar de asegurar que esto tiene un tiempo de perfeccionamiento, esta es una respuesta más del Estado Venezolano a los convenios firmados en años anteriores, cuestión que dibuja el mapa de las relaciones internacionales con una tinta diferente.