Las victimas murieron a tiros por hombres armados no identificados en la ciudad de Herat el pasado sábado.
El Representante Especial instó a las autoridades nacionales a adoptar las medidas necesarias para presentar a los autores de este crimen ante la justicia y pidió a las fuerzas de seguridad afganas ejercer una mayor vigilancia en las semanas previas a las próximas elecciones.
Kubis envió sus condolencias a familiares, amigos y colegas de los que perdieron sus vidas y subrayó que el acto constituye una intimidación violenta de los candidatos electorales y sus simpatizantes, que no debe ser tolerada.
ONU