El Liverpool goleó este lunes sin piedad al Swansea en Anfield (4-1) en el último encuentro de la primera vuelta de la liga inglesa y despidió un agridulce año 2014 con victoria.
El conjunto del norte de Inglaterra, que llegó a acariciar el título de la "Premier League" la pasada temporada, no logró suplir con garantías la sonada baja del uruguayo Luis Suárez, fichado por el Barcelona el pasado verano, y deambula ahora en mitad de tabla de la Premier League.
En el último encuentro de 2014, los pupilos del Brendan Rodgers dijeron adiós al año con buen sabor de boca después de infligir, con tantos de Alberto Moreno, Adam Lallana y Jonjo Shelvey, en propia puerta, una sonora goleada al Swansea, uno de los equipos revelación de este curso en la Premier League.
A la media hora de juego, el conjunto local se puso por delante en el marcador gracias a una buena triangulación entre Alberto Moreno, Lallana y Henderson, y que finalizó el primero con un disparo sin oposición desde el corazón del área.
El defensa español, muy criticado en Inglaterra por su debilidad defensiva, anotó su segundo tanto esta temporada en la "Premier League", después del que logró en la goleada de los "reds" ante el Tottenham.
En los segundos 45 minutos, el público presente en el mítico estadio de Anfield vio cuatro goles: tres de su equipo y uno del Swansea.
A los seis minutos de la reanudación, Lallana presionó la salida de balón del guardameta Lukasz Fabianski y el disparo del polaco rebotó en el cuerpo del exjugador del Southampton y entró en la portería, doblando así la ventaja local.
Del gol tonto de la jornada se pasó al descuento del Swansea apenas un minuto después: el galés Gylfi Sigurdsson aprovechó un error de la defensa del Liverpool para anotar su cuarto tanto de la temporada también con un disparo sin oposición desde dentro del área.
Sin embargo, nueve minutos más tarde, de nuevo Lallana restableció la diferencia de dos goles para el cinco veces campeón de Europa. El internacional inglés recibió un balón al borde del área, encaró a la defensa, se marchó por velocidad y definió a la perfección ante la salida de Fabianski.
En el 69, el centrocampista Jonjo Shelvey disipó cualquier posible acercamiento de los "swans" al enviar de cabeza en su propia portería un saque de esquina botado por Jordan Henderson.
EFE