Auschwitz conmemora 70 años de su liberación
Sobrevivientes de Auschwitz y delegaciones de todo el mundo conmemoraron hoy los 70 años de liberación del antiguo emplazamiento del campo de exterminio nazi.
El escenario de frío y nieve de esta jornada debió ser similar al que encontraron las tropas del ejército soviético que llegaron hasta las puertas de Auschwitz-Birkenau el 27 de enero de 1945, cuando pusieron fin al cautiverio de miles de prisioneros que, abandonados a su suerte por los guardianes, esperaban resignados la llegada de la muerte.
Entre los asistentes se encontraban los presidentes de Francia, François Hollande; Alemania, Joachim Gauk, y Ucrania, Petró Poroshenko, junto al anfitrión, el jefe del Estado polaco, Bronislaw Komorowski.
En su discurso, Komorowski recordó que Polonia se ha convertido en “la depositaria de la memoria de Auschwitz-Birkenau y del Holocausto”, ambos símbolos del “genocidio totalitario”, y pidió al mundo que se esfuerce para evitar que una tragedia así pueda repetirse.
Pero fue el testimonio de los supervivientes lo más acogedor. La exprisionera polaca Halina Birenbaum, actualmente residente en Israel, se dirigió al público, pero sobre todo a los líderes presentes, para lamentar que, si Auschwitz pudo existir durante cinco años, “entonces todo lo perverso es posible en nuestro mundo”.
“Actuar, no sólo recordar”, afirmó por su parte el sobreviviente estadounidense Roman Kent.
“Recordar sí, pero no sólo, también educar a las futuras generaciones para que entiendan lo que sucedió cuando se permitió que el odio se apoderase de todo, hay que enseñar tolerancia y entendimiento, tanto en casa como en el colegio”, pidió en su intervención.
Otro testimonio, el único de un superviviente no judío, fue el del polaco Kazimierz Albin, deportado a Auschwitz en 1940 por cooperar con la resistencia, quien quiso recordar el papel de estos partisanos polacos que lucharon valientemente contra los nazis en los alrededores del campo y que ayudaron a los pocos presos que, como él, lograron escapar con éxito de sus instalaciones.
Hoy en Auschwitz también se dieron cita representantes del mundo de la cultura, el arte o el cine, como el judío estadounidense Steven Spielberg, quien pudo asistir a la emisión del documental de 15 minutos sobre Auschwitz que recientemente ha producido en colaboración con el museo-memorial y la fundación Shoah, que cuenta como narradora con la voz de la actriz estadounidense Meryl Streep.
La ausencia más sonada en esta jornada fue la del presidente ruso, Vladímir Putin, que ha acusado a las autoridades polacas de no haberle invitado.
Putin recordó este martes desde Moscú que “el fin a esa monstruosidad e implacable barbarie nazi lo puso precisamente el Ejército Rojo, que salvó del exterminio no sólo a los judíos, sino también a otros pueblos de Europa y del mundo”.
Se estima que más de un millón de personas, en su mayoría judíos, perecieron en Auschwitz y en el campo anexo, Birkenau, (Oswiecim y Brzezinka, en polaco) debido a las palizas, las cámaras de gas Zyjklon B, el hambre, el agotamiento y las enfermedades.
Hoy, Auschwitz-Birkenau es patrimonio de la Humanidad de la Unesco y un museo-memorial de 200 hectáreas visitado cada año por más de un millón de personas, sobre todo jóvenes, que mantienen un gran silencio cuando acceden al campo dejando atrás el letrero “Arbeit macht frei” (“El trabajo os hace libres”).EFE