SALUD

El Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer elaboró una nueva guía en la que recogióalgunos hábitos cotidianos que reducen el riesgo de padecer la enfermedad, ya que es importante modificar nuestras costumbres y tratar de llevar una vida saludable.

1. Limpiar la casa

Según los investigadores, hacer las tareas del hogar ayuda a prevenir el cáncer, ya que hacer algo de ejercicio habitualmente ayuda a mantener os niveles de hormonas saludables.

2. Comer zanahorias

La alimentación es fundamental para mantenernos saludables y en nuestro peso ideal. Por esta razón es bueno suplir los alimentos altos en grasas por otros con menos calorías, como por ejemplo sustituir las papas fritas por zanahorias crudas. Estas pueden convertirse en el aperitivo perfecto para picar entre horas.

3. Alimentos integrales

Los especialistas aconsejan intercambiar el pan blanco, la pasta o el arroz por sus variedades integrales para aumentar su consumo de fibra. Según una experta, la fibra nos ayuda a sentirnos llenos durante más tiempo, por lo que es más fácil mantener un peso saludable. Además, se desplazan rápido por el sistema digestivo por lo que se asocia con la reducción del riesgo de padecer cáncer de intestino.

4. Sustituye la sal por especias

Ingerir demasiada sal no sólo aumenta la presión arterial sino que también incrementa el riesgo de desarrollar cáncer de estómago, ya que, esto puede deberse a los daños que causa la sal en las paredes del estómago.

Podemos sustituirla por pimienta, albahaca, laurel, ajo, entre otros.

5. Ten cuidado con la carne

Según el Fondo Mundial de Investigación del Cáncer, en algunos tipos de carnes ahumadas, curadas o saladas mediante conservantes, se pueden desarrollar determinadas sustancias cancerígenas.

La guía recomienda reducir el consumo de carne a un día a la semana sustituyéndola por pescado o verduras.

6. Has ejercicio (al menos unos minutos al día)

Sólo 30 minutos al día de actividad física puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer, ya que ayuda a mantenerse en forma reduciendo el riesgo de cánceres relacionados con el peso, sino que además fortalece el sistema inmunológico y ayuda a mantener el sistema digestivo saludable.

La clave está en eliminar la vida sedentaria y tratar de estar en movimiento, además de comer saludablemente. Recuerda que mientras más hagas, mas reduces el riesgo de cáncer.

Con información de Elconfidencial.com