El presidente de la República de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, abrió su participación en la Asamblea General de la ONU hablando sobre la necesidad de replantear la hegemonía del poder y acusando abiertamente a las potencias del mundo como las principales responsables de la desigualdad, el terrorismo y la crisis que el mundo atraviesa.
Resaltó que todos los dioses llaman al hombre a asumir una posición humanista en la tierra, y señaló que la creación de las Naciones Unidas responde a las acciones de muchos hombres que deseaban promover la paz en libertad.
Sin embargo, aseguró que la situación actual está muy lejos de ser la idónea, pues “las guerras, el hambre y la pobreza alejan al hombre de conseguir ese ideal”.
Hizo especial énfasis en el desequilibrio entre los más ricos y los más pobres, desigualdad que consideró inadmisible e inhumana; y llamó a las naciones a buscar la raíz de estos problemas en las maneras en como el mundo ha sido gobernado hasta ahora.
Para el primer mandatario iraní, el colonialismo, la destrucción de recursos y la alienación de culturas son las responsables de la creación de guerras, la injusticias, el hambre y el terrorismo.
Acusó a los EE UU y a las potencias europeas de ser los primeros en aupar las guerras e invasiones en regiones lejanas como un método de su propio beneficio económico, afirmación que ejemplificó con eventos como los del 11 de septiembre, que fueron tomados como excusa para la invasión de un país extranjero.
Ahmadinejad aseveró que en parte son los responsables de las grandes crisis que socavan al mundo, ya que sus “políticas irresponsables” son las causantes de la debacle que enfrenta el mundo.
Consideró como inadmisible que estas naciones sean parte del Consejo de Seguridad de la ONU, cuando son los gobiernos de EE UU y Europa los primeros en abrir la brecha entre el norte y el sur.
Retó a imaginar, qué sería del mundo si se le daba a los países más pobres el mismo derecho de participación y señaló que es importante preguntarse de dónde vienen los planteamientos sociales e ideológicos de las naciones dominantes, cuyos principios sólo están motivados en el dinero y el poder.
Acusó a las potencias de querer avanzar en el mundo, aunque ese avance vaya en detrimento de los más pobres, implique abuso del poder y procure “sembrar la semilla de la discordia” entre naciones para que no logren la integración.
Manifestó que estas potencias son altamente clasistas y elitistas y que utilizan sus métodos imperialistas para instaurar sus creencias y su poder. Además de utilizar la amenaza de la guerra y de las presiones económicas para evitar que otras naciones vayan en contra de sus intereses.
Espetó que los retos del mundo no pueden enfrentarse bajo estos parámetros, “es necesario un replanteamiento de la gobernanza del mundo para lograr los cambios que se desean”.
Delegados abandonan Asamblea ONU durante discurso de Ahmadineyad
Delegados de varios países abandonaron hoy la Asamblea General de la ONU cuando el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, subió al podio y acusó a los gobiernos occidentales de violar la ley internacional y a Estados Unidos de llevar a cabo guerras y perpetrar genocidio.
La delegación estadounidense y otras europeas, como la francesa, abandonaron la sala a modo de protesta cuando Ahmadineyad acusó a los países de esclavizar África y dominar el Consejo de Seguridad de la ONU.
“Las respuestas son claras”, dijo el presidente iraní. “Proclaman que tienen el poder indisputable e insisten en imponer sus estilos de vida a los otros”, añadió Ahmadineyad, ante la Asamblea en Nueva York.
“Algunos países europeos siguen utilizando hoy en día, después de seis décadas, el Holocausto como pretexto para suministrar dinero a los sionistas en Israel”.
Ya en los últimos años, Ahmadineyad había desatado escándalos con sus palabras contra Occidente en sus discursos ante la Asamblea General de la ONU.
Reuters