Un clima más fresco y húmedo en la zona cerealera de Estados Unidos durante la próxima semanafrenaría un mayor deterioro del maíz y la soja tras el daño de este verano boreal por la peor sequía en más de medio siglo, dijo el martes un meteorólogo agrícola.
"El maíz está muy golpeado como para recibir algo de ayuda pero parte de la soja en el norte podría mejorar, aunque los granos en el centro y el sur están demasiado dañados para recuperarse", dijo Don Keeney, un meteorólogo de MDA EarthSat Weather.
Keeney dijo que hasta un 60 por ciento de la región central de Estados Unidos recibiría de 0,25 pulgadas (6 milímetros) a 1,00 pulgadas de lluvia esta semana y que los estados de las grandes llanuras también recibirían un respiro de 0,30 pulgadas a 1,00 pulgada.
Los próximos 10 días también deparan un clima más fresco, con máximas en los 70 (grados Fahrenheit) y en los 80 grados Fahrenheit en vez de en los implacables 90 grados Fahrenheit y 100 grados Fahrenheit que recortaron el panorama de las cosechas, dijo Keeney.
"En los próximos 10 días habrá un clima otoñal. Se espera un calentamiento para el pronóstico para dentro de 11 a 15 días pero no el calor que vimos en todo el verano", dijo Keeney.
El martes, Commodity Weather Group (CWG) dijo que la mitad de la región central recibiría chaparrones aislados pero que las zonas resecas probablemente se expandan de 30 por ciento de la región, actualmente, a por lo menos un 40 por ciento durante la próxima semana.
"Esto incluirá partes del centro de Illinois, el oeste de Iowa, Nebraska, Missouri y el sur de Wisconsin", dijo Joel Widenor, un meteorólogo de CWG.
"Una ampliación de las lluvias en las (grandes) llanuras y el delta (del Mississippi) ayudará a mejorar la humedad de la presiembra para zonas de trigo de invierno y también mitigará la presión sobre la cosecha doble de soja en el delta," dijo el meteorólogo.
El informe semanal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) sobre el progreso de las cosechas publicado el lunes mostró una estabilización de las condiciones del maíz estadounidense tras nueve semanas de disminuciones en las clasificaciones y una leve mejora en las condiciones de la cosecha de soja.
Sin embargo, las calificaciones de las condiciones de los dos cultivos permanecían en sus niveles más bajos desde la última sequía grave, en 1988.
A medida que la peor sequía en más de medio siglo marcaba su paso, los inversores incrementaban sus compras, impulsando un alza de los precios del maíz en más de 50 por ciento frente a fines de mayo a máximos históricos por encima de 8 dólares por bushel.
El mercado volvía a subir el martes tras un breve revés desde máximos históricos.
El viernes, el USDA reveló datos que mostraban fuertes recortes para la producción de este año de maíz y oleaginosas al tiempo que la sequía se expandía por la zona cerealera del país norteamericano.
El USDA dijo que la cosecha de maíz de este año caería por debajo de 11.000 millones de bushels por primera vez en seis años y que el rendimiento en bushels por acre marcaba un mínimo en 17 años. La producción de soja fue estimada en un mínimo en cinco años y el rendimiento de la soja por acre casi en un mínimo en 10 años.
Analistas y expertos en cosechas dijeron que podría haber más recortes en futuros informes.