(Alemania, 17 de octubre. AFP) – Una política fue apuñalada el sábado por motivos aparentemente “racistas”, vinculados con la llegada masiva de refugiados a Alemania, en momentos en que numerosos migrantes seguían ingresando a la Unión Europea por Eslovenia, tras cerrar Hungría su frontera con Croacia.
Horas después de que dos nuevos naufragios dejaran al menos 16 migrantes muertos en aguas griegas y turcas, Angela Merkel expresó el sábado su “estupor” por el apuñalamiento de la candidata a la alcaldía de Colonia (oeste) Henriette Reker, en un clima de creciente tensión por la política migratoria del gobierno.
Alemania prevé recibir hasta un millón de migrantes este año, un récord en Europa.
La política fue apuñalada mientras hacía campaña en un mercado, anunció la policía regional.
Reker, que resultó gravemente herida en el cuello, “era responsable de la acogida de refugiados” en la alcaldía de Colonia, explicó Wolfgang Albers, director de la policía de Renania del norte-Westfalia. “En este contexto, se privilegia una acción política” dijo.
El agresor, un alemán desempleado desde hace mucho tiempo y detenido después de los hechos, “dijo que había cometido este acto con una motivación racista”, añadió un responsable de la policía de Colonia, Norbert Wagner.
Reker, candidata sin partido pero apoyada por los conservadores (CDU) de Merkel, es una de las candidatas favoritas a la alcaldía de Colonia, la cuarta ciudad de Alemania con 980.000 habitantes.
La candidata sufre “heridas serias” pero su estado es “estable”, según Albers.
Mientras tanto, los migrantes que intentan pasar hacia el norte de Europa por los Balcanes empezaban a llegar a Eslovenia, después de que Hungría cerrara su frontera con Croacia.
Los primeros autobuses de migrantes llegaron el sábado por la mañana a Eslovenia procedentes de Croacia. Horas después, los primeros migrantes llegaron a la frontera con Austria, confirmando que el “corredor” hacia el oeste prometido por Eslovenia funcionaba.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) expresó su satisfacción, considerando que las autoridades eslovenas se estaban haciendo cargo de modo “fluido” de los refugiados, principalmente originarios de Siria, Irak y Afganistán.
El gobierno esloveno indicó haber tenido conversaciones con Croacia para crear “uno o dos” puntos de cruce para esos migrantes.
Hungría cerró la noche del viernes, tal como anunció, sus principales puntos de paso de migrantes de su frontera con Croacia, bloqueada ahora en amplias secciones por una imponente valla de alambre de púas.
Más de 170.000 migrantes habían entrado en Hungría vía Croacia desde el 15 de septiembre.Los dos países colaboraban en la práctica para asegurar el tránsito diario.
Nuevos naufragios mortales
Los miles de migrantes que vienen hacia Europa por Grecia, Macedonia y Serbia siguen afrontando peligro de muerte.
Doce migrantes murieron ahogados el sábado cuando la embarcación en la que viajaban naufragó en aguas turcas, informó la agencia de prensa turca Anatolia.
Los guardacostas turcos recuperaron los cuerpos a bordo de un bote de madera que salió de la estación balnearia de Ayvalik (noroeste) con destino a la isla griega de Lesbos, indicó la agencia.
Los socorristas lograron rescatar a 25 pasajeros del barco, que pidieron ayuda con sus teléfonos móviles.
Poco antes, también el sábado, los guardacostas griegos habían anunciado que cuatro migrantes, tres niños y una mujer, murieron ahogados cuando la embarcación en la que viajaban naufragó en el mar Egeo.
Once personas que iban en el mismo bote fueron rescatadas y los socorristas buscaban a un niño desaparecido.
Alrededor de 300 migrantes que intentan huir de los conflictos y la pobreza en sus países han muerto en el mar Egeo este año, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Más de 600.000 migrantes han cruzado el Mediterráneo desde enero, según datos de la OIM, de los cuales más de 466.000 desembarcaron en Grecia. Más de 3.000 personas han perecido en esta travesía.