(AFP) - La Corte Interamericana de Derechos Humanos realiza este lunes en la capital costarricense la última audiencia de una demanda contra el Estado venezolano por el asesinato de Néstor Uzcátegui, perpetrado en enero de 2001 presuntamente por policías del estado de Falcón.
La Corte escuchó a testigos aportados tanto por los demandantes como por los representantes del Estado, así como los alegatos finales de los representantes de ambas partes.
Nestor Uzcátegui, un joven de 21 años de edad, fue asesinado el 1 de enero de 2001 en la puerta de su casa y en presencia de su hermano Luis, quien se convirtió en el principal testigo del crimen.
“Desde entonces, he tratado de obtener justicia por parte de las autoridades venezolanas, pero todo ha sido inútil”, aseguró Luis Uzcátegui a la AFP luego de declarar ante los magistrados de la Corte.
“Durante diez años he sufrido detenciones arbitrarias, allanamientos ilegales, amedrentamientos, al punto de que tuve que irme del Estado, dejar mi casa, mi trabajo y mis estudios universitarios”, afirmó.
Según el accionante, en el asesinato de su hermano no medió ningún motivo político, sino que fue obra de un comando policial que -dijo- actúa al margen de la ley en tareas de limpieza social.
El homicidio se produjo a raíz de un altercado que el joven mantuvo con uno de los jefes del escuadrón, afirmó Luis Uzcátegui.
El caso fue presentado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ante la Corte en 2008, tras dictar medidas cautelares en favor de Uzcátegui y sus familiares, que no han sido cumplidas por el Estado venezolano, según la versión de las víctimas.
Los representantes del Estado, por su parte, aseguraron que la investigación del asesinato ha seguido su curso en los tribunales ordinarios y que la prolongación del proceso obedece fundamentalmente a la complejidad del caso.
Tras la audiencia de este lunes, la Corte Interamericana, una entidad de la Organización de Estados Americanos, deliberará y dictará sentencia en los próximos meses.
