Al menos siete policías afganos murieron en un ataque talibán contra un puesto de control en la provincia de Faryab, en el norte de Afganistán, informó hoy a Efe una fuente oficial.
El ataque tuvo lugar anoche en el área de Begai, en el distrito de Qaissar, y entre los fallecidos está el policía al mando del puesto de control, afirmó el portavoz del Gobernador provincial, Javid Bedar.
Según el portavoz, existen muchas posibilidades de que los insurgentes hubieran perpetrado el ataque con la ayuda de un talibán infiltrado entre las fuerzas de seguridad.
Ese tipo de ataques "internos" se han producido con bastante frecuencia en los últimos años y a menudo el objetivo de esas acciones son las tropas internacionales de la OTAN desplegadas en Afganistán, aunque los talibanes aún no han reivindicado la acción.
Ayer el portavoz del ministerio afgano del Interior, Sadiq Sadiqi, afirmó en una rueda de prensa que las bajas dentro del cuerpo policial han descendido en los últimos meses debido, sobre todo, "a una buena administración", aunque no aportó datos.
Sin embargo, un analista militar, el General Abdul Baqi Rashed, aseguró a la agencia local AIP que las declaraciones de Sadiqi no son más que "propaganda" para "animar a las fuerzas de seguridad", pues no cree que hayan descendido ya que la "guerra continúa con toda su intensidad".
El conflicto en Afganistán está en uno de los momentos más sangrientos desde la invasión estadounidense que propició la caída del régimen integrista talibán a finales de 2001 y cuando está prevista la retirada completa de las tropas de la OTAN a fines de 2014.
EFE