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jueves, 1 de septiembre de 2011

La duquesa de Alba dice que repartió su fortuna porque quiso

La duquesa de Alba, una de las mujeres más ricas de España, de 85 años, asegura que nadie la presionó a distribuir su fabulosa fortuna entre sus hijos para convencerlos de que aceptasen su boda con un hombre 24 años más joven que ella, en declaraciones publicadas este jueves.

"El reparto lo he hecho yo porque he querido. Nadie me ha presionado. Además, mientras yo viva, sigue todo en mis manos", afirmó María del Rosario Cayetana Fitz-James-Stuart a la revista española ¡Hola!.

En su primera entrevista desde que se anunció su boda el próximo octubre con Alfonso Díez, un funcionario de 61 años, la aristócrata española afirma que le costó muchos esfuerzos superar las objeciones de sus hijos a esta unión.

Esta Grande de España, dos veces viuda, repartió el mes pasado entre su hija y sus cinco hijos la mayor parte de su fortuna, que incluye palacios, tierras, fincas y obras maestras de grandes pintores como Goya, Velázquez, Murillo, Rembrandt y Rubens.

El patrimonio de Cayetana de Alba, que según el libro Guinness de los Récords es la noble con más títulos del planeta, está estimado entre 600 millones y los 3.500 millones de euros (entre 850 millones y 5.000 millones de dólares).

Sin embargo, pese a haber distribuido su patrimonio, la aristócrata seguiría manteniendo el control de su fortuna hasta su muerte.

"No soy una persona que suela dejarse manejar. Tengo mis propias ideas y procuro hacerlas realidad", afirmó la duquesa, asidua de la prensa del corazón española, fotografiada en su lujosa residencia de la isla mediterránea de Ibiza.

La noble española afirma que su futuro esposo, funcionario en el ministerio de Trabajo, "es una persona estupenda". "Es la persona que me ha cambiado la vida totalmente", dice.

Entre la fortuna de la duquesa de Alba figuran el Palacio de Liria en Madrid, el Palacio de Monterrey, el castillo de El Tejado en Salamanca (centro) y el palacio de Las Dueñas en Sevilla (sur).

Pero la aristócrata está convencida de que no fue su riqueza lo que sedujo a Díez.

"Alfonso ha renunciado a muchas cosas. Desde el principio ha dicho que estaba enamorado no de los títulos sino de la mujer que estaba en posesión de ellos", declara.

AFP