Tres miembros de ETA fueron detenidos ayer por las autoridades de Venezuela después de que el barco en el que habían huido de Cuba encallara en una zona denominada Los Roques, según fuentes de la lucha antiterrorista.
Los tres etarras han sido identificados como Elena Barcena Argüelles, alias “La Tigresa”, José Ignacio Etxarte Urbieta, antiguos miembros de ETA político-militar 8ª asamblea, y Francisco Javier Pérez Lekue, alias “Niko”. Con ellos fue detenido también un ciudadano haitiano que les estaba ayudando a fugarse de Cuba.
Elena Barcena y Javier Pérez Lekue dirigieron hace algunos meses una dura carta de protesta contra las autoridades cubanas porque no les facilitaban la salida de la isla. Ante la negativa de La Habana para dejarles salir, los tres etarras se han fugado por su cuenta. La fuga era conocida desde hace algunos días por los servicios antiterroristas españoles.
Llamaron «carceleros» a las autoridades castristas
En su escrito de denuncia fechado en “Ciudad de La Habana, el 8 de febrero de 2011″, Bárcena y Pérez Lekue tildaron de “carceleros” a los gobernantes de La Habana, al tiempo que les acusan de haber incumplido el acuerdo de 1984 por el que el Gobierno castrista se comprometió a no impedir la eventual salida de la isla de los integrantes de la comunidad etarra. Sostienen que aunque al principio los gobernantes cubanos cumplieron lo acordado y permitieron que los miembros de ETA abandonaran el país, posteriormente han ido poniendo más y más trabas a las salidas, hasta llegar a la prohibición, “primero en la práctica y más tarde diciéndolo abiertamente”, indican en la misiva remitida a medios de comunicación vinculados a la “izquierda abertzale”.
“Queremos hacer público nuestro rechazo hacia la actitud de las autoridades de este país, que nos condena, de facto, a cadena perpetua, en un marco, además, de absoluta inseguridad jurídica”, indicaron en el escrito.
