El Gobierno jordano amenazó hoy con tomar medidas en contra de Israel por las recientes incursiones de sus fuerzas en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, mientras que cientos de ciudadanos se manifestaron en las calles de Ammán para pedir el fin de las relaciones con ese país.
El portavoz del Ejecutivo jordano, Mohamed Mumani, aseguró en un comunicado que su gobierno "tomará todas las medidas diplomáticas y legales si Israel no detiene su agresión flagrante".
Asimismo, Jordania advirtió a Israel de "las duras consecuencias de su actuación, que es inaceptable para todos los musulmanes y que representa una amenaza sin precedentes, y contraviene la ley y tratados internacionales", según la nota.
La Explanada de las Mezquitas, situada en Jerusalén Este, ocupado por Israel en 1967, es el tercer lugar más sagrado del islam y Jordania tiene la custodia de este santuario, según el tratado de paz entre ambos países de 1994.
Por otra parte, cientos de personas se manifestaron en las calles de Ammán y pidieron la expulsión del embajador israelí en Jordania, así como el fin del acuerdo de paz con Israel.
Los manifestantes también denunciaron lo que calificaron de "inacción" por parte de los gobiernos árabes y musulmanes frente a la violencia registrada en la Explanada, donde la policía israelí ha penetrado en repetidas ocasiones en las pasadas semanas y se ha enfrentando con los fieles musulmanes.
Las manifestaciones fueron convocadas por sindicatos y grupos políticos y sociales, y salieron del edificio donde se ubican las oficinas de las asociaciones profesionales para llegar hasta la sede del Gobierno jordano.
El presidente del Comité para la Defensa de los Santos Lugares Islámicos, Abdulá Obeidat, pidió a los países árabes y musulmanes que asuman "sus responsabilidades a la hora de defender la mezquita de Al Aqsa y los palestinos que la están defendiendo frente a los israelíes".
Manifestantes palestinos se han enfrentado recientemente a las fuerzas de seguridad israelíes en la Explanada de las Mezquitas y sus alrededores, y han acusado a Israel de permitir la entrada de judíos al recinto sagrado, que ellos denominan Monte del Templo.
Hace dos semanas, medio centenar de diputados jordanos instaron a su gobierno a expulsar de Ammán al embajador israelí y a "revisar" el tratado de paz, en protesta por el aumento de laviolencia en Jerusalén y Cisjordania.
EFE
