Las familias de un grupo de médicos bajo juicio por haber participado en protestas contra el gobierno en Bahréin indicaron que los galenos han sido torturados para que hagan confesiones falsas.
La esposa de uno de los médicos le dijo a la BBC que su marido sólo habló después de haber permanecido de pie y esposado durante tres semanas, sin poder dormir.
Los fiscales sostienen que los médicos tomaron el control del hospital más grande de Bahréin en marzo y lo utilizaron como una base para protestas antigubernamentales.
Los médicos están acusados de varios delitos, entre ellos el robo de sangre del banco de sangre del hospital y del transporte de armas de fuego a los manifestantes en ambulancias.
Grupos de derechos humanos dicen que el hecho de que los médicos están siendo juzgado en un tribunal militar muestra que las autoridades están decididas a hacer de ellos un ejemplo.