Karim Benzema es el único delantero que se está entrenando en los campos de la UCLA. El francés, además, ha llegado muy fino. Sin ninguno de los clásicos kilos de sobrepeso con los que acostumbraba a aparecer después de las vacaciones. Gonzalo Higuaín está en la Copa América y Cristiano Ronaldo sigue sin ser considerado un punta por José Mourinho. Y eso que marcó 40 goles la temporada pasada solo en Liga. Los tres sumaron 65 (15 Benzema y 10 El Pipa). Para el técnico portugués solo hay dos delanteros en la plantilla (Adebayor, que estaba cedido regresó al Manchester City) de ahí que vuelva a insistir en pedir otro más. Lo hizo ayer en Los Ángeles. No se sentaba en una sala de prensa desde el pasado 29 de abril. Fue un par de días después de que perdiera en casa contra el Barça en Champions y arremetiera contra el rival, los árbitros y la UEFA
Dos meses y medio después de aquello, y con una sanción por cumplir de tres partidos en Europa, Mourinho volvió a hablar antes del primer amistoso, el sábado contra los Galaxy. Llevaba sus iniciales estampadas en la camiseta. La cara bronceada y seria. Felicitó a David Beckham, también sentado en la mesa, por el nacimiento de su hija, repasó el estado en el que se encuentra la plantilla -"muerta de cansancio"-, los fichajes hechos (5) y por hacer, pidió un delantero y mandó el clásico recado a la prensa. "El año pasado tuvimos una experiencia difícil con Higuaín por su lesión en la espalda. Eso demostró que es fundamental tener a tres delanteros centro en la plantilla y que jueguen las tres competiciones. Higuaín está recuperado, Karim (Benzema) ha mejorado mucho, pero nos falta un tercero", explicó el técnico. Hasta hace una semana, en el club dudaban si era necesario o no otro delantero. ¿Está ese nombre entre los de Neymar, Agüero y Adebayor?, le preguntaron. La respuesta sonó a vacile. O al menos, la sonrisa. "Neymar es del Santos, Agüero del Atlético y Adebayor del City. A lo mejor Adebayor es el que está más cerca de nosotros por haber estado aquí en los últimos seis meses".
Destacó Mourinho la juventud de la plantilla (24,8 el promedio de edad) -"fichamos sin perder esa línea que empezamos el verano pasado", dijo- y negó que todo esté enfocado al primer duelo contra el Barça del 14 de agosto. "La pretemporada no es para preparar la Supercopa sino la temporada. Este año quiero lleguemos más fuerte al primer partido de Liga", comentó. "No quiero comparar mi plantilla con la del Barcelona. Aquí hay un grupo muy joven. Iker es casi un tío muy mayor y solo tiene 30 años", prosiguió. El club hizo oficial ayer las renovaciones de Pepe (hasta 2016, por la que Mourinho había hecho campaña toda la temporada) y de Sergio Ramos (hasta 2017). "Yo ya lo sabía desde hace mucho tiempo. El Real Madrid parece que está cambiando un poco, porque ahora la prensa sabe las cosas cuando nosotros queremos que las sepa, no como antes", comentó lanzando un recado contra las filtraciones, una de sus obsesiones. Sin embargo, Sergio Ramos negó ayer en La Sexta que hubiese firmado la renovación. "Faltan cosas todavía", dijo el lateral.
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