El secretario de Estado de Finanzas griego, Filipos Sajinidis, afirmó que Grecia tiene dinero para pagar los sueldos públicos y las pensiones sólo hasta octubre, lo que hace esencial que se entregue el sexto tramo del préstamo internacional de 110.000 millones de euros aprobado en mayo de 2010.
En una entrevista al canal privado ateniense "Mega", Sajinidis afirmó que "es seguro que hasta octubre tenemos dinero para pagar sueldos y pensiones".
"En este momento nos esforzamos para que el país siga funcionando sin que afronte problemas", prometió.
Ante esa situación, los medios griegos insisten en el regreso este miércoles a Atenas de los inspectores del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y de la Unión Europea (UE).
Los representantes de estas instituciones suspendieron su inspección el pasado 2 de septiembre para dar tiempo a Grecia a aplicar las reformas y medidas económica acordadas el pasado 21 de julio, una condición exigida a Atenas para concederle un nuevo paquete de ayuda de 160.000 millones de euros.
Del informe que elaboren los inspectores dependerá que se entreguen a Grecia los 8.0000 millones de euros del sexto tramo del primer rescate.
A la espera de la llegada de los inspectores, Grecia comenzó la semana con nuevas protestas laborales contra la dura política de austeridad del Gobierno que el FMI y la UE han exigido a Atenas.
El primer ministro griego, el socialista Yorgos Papandréu, se reúne con su grupo parlamentario para asegurarse su apoyo en la aprobación de un nuevo impuesto sobre la propiedad inmobiliaria con el que se pretenden recaudar 2.000 millones de euros hasta final de año.
Además, El Gobierno sondea ya los apoyos para sacar adelante a finales de octubre los presupuestos estatales para 2012, en los que la reducción de gastos y el aumento de ingresos son los ejes principales.
Los 27.000 taxistas del país comenzaron esta madrugada una nueva huelga de 48 horas contra la liberalización de la profesión.
EFE