Los ejércitos de Corea del Sur y EEUU comenzarán mañana en la costa este surcoreana unas maniobras navales de dos días en la que participará el portaaviones de propulsión nuclear estadounidense USS Nimitz, en medio de las críticas de Corea del Norte.
La embarcación estadounidense, considerada una de las mayores máquinas de guerra del mundo con cerca de 97.000 toneladas, abandonará el puerto de Busan (suroeste) el lunes para iniciar los ejercicios militares, revelaron fuentes del Gobierno surcoreano a la agencia Yonhap.
Junto con el Nimitz, que según expertos cuenta con una tripulación de casi seis mil hombres y capacidad para 90 aviones y helicópteros, participarán también los destructores surcoreanos King Sejong, equipado con antimisiles Aegis, y el Chungmugong Yi Sunshin, especializados en detectar y neutralizar proyectiles y submarinos.
La llegada del portaaviones estadounidense provocó la queja de Corea del Norte, que denunció que se trata de "una amenaza abierta y un chantaje" contra el país, en un momento de aparente calma tras la tensión vivida los últimos meses.
En un despacho emitido por la agencia del hermético régimen comunista, KCNA, Pyongyang consideró además la llegada del Nimitz a aguas de la península coreana como "una grave provocación militar para desatar una guerra nuclear".
Los ejercicios militares conjuntos Foal Eagle, concluidos recientemente, provocaron este año la respuesta contundente de Corea del Norte, que inició una fuerte campaña de amenazas bélicas contra Seúl y Washington al considerar las maniobras un ensayo de invasión a su país.
No obstante, el régimen norcoreano parece haber rebajado el tono en las últimas semanas, después de que fuentes de la inteligencia estadounidense hayan detectado movimientos que parecen indicar el repliegue de los misiles de corto y medio alcance desplegados por el régimen en la costa oriental norcoreana el mes pasado.
EFE