El ébola fue controlado y se espera superarlo definitivamente en 2016
(Ginebra, 18 de diciembre. EFE).- La epidemia de ébola en África occidental consiguió quedar bajo control en 2015, aunque siguen apareciendo casos residuales en algunos de los países afectados, que esperan superar definitivamente en 2016 esta emergencia sanitaria.
Esta epidemia de ébola fue la más grave desde que se descubrió esta enfermedad hace más de cuarenta años, con 28.601 casos contabilizados, de los que una tercera parte (11.299) fallecieron.
En los últimos meses, el número de víctimas disminuyó de forma continúa y en noviembre se registraron sólo 3 casos, todos en Liberia, que a inicios de septiembre había sido declarada libre de ébola.
Para los especialistas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) está claro que la cadena inicial de transmisión del virus está rota y que estos casos están relacionados con personas que superaron la enfermedad, pero que mantienen en el organismo residuos del virus y pueden transmitirlo.
Los estudios realizados durante la epidemia demostraron que el semen de varones convalecientes de ébola puede contener la carga viral hasta nueve meses y se cree que las recientes infecciones en Liberia están vinculadas a un caso de ésos.
“Hay evidencia de que habrá casos de virus (proveniente) de población convaleciente que tendremos que manejar”, explicó recientemente el director ejecutivo de la OMS para emergencias sanitarias, Bruce Aylward.
Se espera que la presencia residual del virus del Ébola en el semen de los hombres que padecieron esta enfermedad desaparezca en el transcurso de los próximos seis a doce meses.
El panorama para la OMS es más bien optimista porque durante los dos años que duró la epidemia se dotó a los países afectados de las infraestructuras y capacidades necesarias para prevenir, detectar y responder a cualquier rebrote serio.
“Hemos avanzado mucho con respecto al pico de la epidemia y estos nuevos casos serán cada vez más raros, y esperamos que paren del todo en 2016″, recalcó Aylward.
Guinea, Liberia y Sierra Leona cuentan ahora, cada uno, con tres equipos de especialistas listos para ponerse en pleno funcionamiento en 48 horas y con capacidades para gestionar un resurgimiento de casos, como ha ocurrido últimamente en Liberia.
“Lo que ha pasado en Liberia demuestra la rápida capacidad de respuesta y cuán diferente es la situación hoy con respecto a 18 meses atrás”, enfatizó Aylward.
Sierra Leona fue declarada libre de ébola el 7 de noviembre y ahora se encuentra dentro del periodo de noventa días de vigilancia sanitaria reforzada, que concluirá el próximo 5 de febrero en caso de que no se registre ningún caso nuevo hasta entonces.
En Guinea está transcurriendo el periodo de 42 días sin casos y el último enfermo, tras su recuperación, dio negativo por segunda vez a un prueba de diagnóstico. Cumplidas estas condiciones, este país podrá ser declarado libre de ébola.
“Somos moderadamente optimistas y creemos que hemos llegado al final de cualquier transmisión asociada al brote original de ébola“, señaló Aylward.
Para esto, los países cuentan con nuevos instrumentos, como pruebas de diagnóstico rápido que están siendo evaluadas en cada uno de ellos y equipos de laboratorio en cuyo uso se está entrenando a personal local.
De esta manera podrán realizar las pruebas finales de confirmación, con una tecnología punta que no existía hace un año.
Otra de las herramientas más importantes que se tiene ahora es la vacuna que superó las primeras fases de ensayos clínicos y se puede ofrecer a personas en riesgo de contraer el virus.
Ese producto aún no cuenta con las autorizaciones necesarias y pueden ser utilizado sólo en ensayos o casos particulares.
Sin embargo, Aylward indicó que la OMS trabaja con los productores y entidades reguladoras para conseguir “su acceso extendido y que pueda utilizarse como parte de la respuesta” ante eventuales rebrotes.
Para seguir con el plan de respuesta al ébola en los tres países afectados y garantizar su final, se necesitan entre noviembre y marzo próximo 244 millones de dólares, de los cuales sólo se han conseguido 121 millones.
Los más recientes casos en Liberia “demuestran que necesitamos estos recursos”, señaló el enviado especial de la ONU para el ébola, David Nabarro.