Rudy Eugene, quien arrancó a bocados gran parte del rostro de un indigente, sólo consumió marihuana el día del incidente y no la temida droga conocida como "sales de baño", como se había especulado inicialmente.
Según el informe forense difundido este miércoles, en la sangre del hombre, abatido a tiros por la Policía de Miami (Florida), sólo se encontraron restos de marihuana, una sustancia que no está ligada a los agresivos comportamientos asociados a las "sales de baño" y que la novia de Eugene ya dijo que el fallecido había fumado ese día.
Hace un mes, el hombre arrancó a bocados el 75 por ciento del rostro del indigente Ronald Poppo en la pasarela lateral de una carretera de Miami que une la ciudad con Miami Beach, algo que, según la Policía, quedó registrado en cámaras de seguridad cercanas.
El hecho de que estuviera desnudo y que siguiera peleando con fuerza después de ser disparado por la Policía, hizo temer a los agentes que Eugene hubiera ingerido "sales de baño".
Según los expertos, esa droga sintética eleva la temperatura corporal y la fuerza aparente del que la consume, entre otros efectos.
Sin embargo, el informe forense sólo ha identificado componentes activos de marihuana en la sangre del fallecido y no "sales de baño", cocaína, LSD, anfetaminas, heroína, marihuana sintética o cualquier otro tipo de droga.
Pese a que las pruebas se encargaron también a un segundo laboratorio externo, tampoco se encontraron en su sangre restos de alcohol, medicamentos o cualquier sustancias psicotrópicas o adulterada.
"Con los límites de la tecnología disponible en ambos laboratorios, marihuana es la única droga identificada en el cuerpo de Rudy Eugene", concluye el informe forense, coherente con el testimonio que ofreció la novia del fallecido, quien dijo que horas antes del suceso el atacante había fumado marihuana.
Recientemente también se hizo público que Eugene tampoco tenía restos de carne humana en su estómago.
El hombre al que atacó, por motivos que aún se desconocen, sobrevivió y se recupera lentamente en un hospital, donde los médicos tratan de recomponerle la cara.
Si no fueron las "sales de baño" siguen abiertas las dudas sobre qué fue lo que llevó a Eugene, que volvía a pie de Miami Beach -donde había dejado su vehículo-, a desnudarse primero, seguir andando, y luego tirarse al suelo, desnudarse y atacar a mordiscos al indigente que se cruzó con él.
A raíz de este incidente, que dio la vuelta al mundo, se multiplicó la publicación de otros supuestos casos de canibalismo y diversas autoridades locales se apresuraron a prohibir la comercialización de las "sales de baño" y de la marihuana sintética, así como los componentes con los que se elaboran.
EFE