Nota de prensa).- La Revolución Bolivariana tiene grandes desafíos por delante como el de “superar los paradigmas culturales y publicitarios del capitalismo, pero hay que subrayar que nuestra revolución no anda copiando modelos sino creando un espacio donde
convergen todas las iniciativas”.
Tal afirmación fue hecha en el marco del conversatorio sobre socialismo Un Mundo Mejor es posible que promueve el constituyente William Ojeda, y que contó este viernes con la participación protagónica de la presidenta de la Comisión Permanente de Cultura de la Asamblea Nacional, diputada Gladys Requena.
La asambleísta Requena expresó que en la Revolución Bolivariana “no estamos copiando modelos, tomamos lo que nos sirve de otras experiencias, y lo que no nos sirve lo desechamos”.
“El modelo cubano es una fuente que alimenta nuestro esfuerzo, pero nosotros tenemos una ruta propia que es la expresada en la Constitución Bolivariana”, afirmó al momento de comentar que la experiencia socialista europea, el llamado socialismo científico, cometió un gran error que fue el estatizarlo todo.
“El llamado socialismo real nos demuestra que no todo puede hacerlo el Estado, pero el Estado sí debe asumir su rol de ente rector de la economía y de la sociedad, porque tiene la responsabilidad de ser el garante del equilibrio y el bienestar de la sociedad en muchos aspectos tan fundamentales como salud, educación y emancipación en general”.
Cabida al sector privado
Indicó que “el socialismo a la venezolana” reconoce tanto la iniciativa estatal como la particular. “Como lo establece nuestra Constitución, el capital privado tiene cabida, siempre y cuando sea no solo para generar riqueza sino también para cooperar con la sociedad”.
La diputada Gladys Requena (Psuv-Vargas) hizo una invitación con claridad: “el capital privado que quiera venir, que venga tranquilamente, siempre y cuando tenga el compromiso de la corresponsabilidad en el sentido de que su función no es solo la de enriquecer a unos pocos sino la de además cooperar en las funciones de crear bienestar para toda la sociedad”, resaltó en el conversatorio que se celebra todos los viernes.
Requena además conceptualizó su visión del socialismo bolivariano del siglo XXI, el “socialismo a la venezolana”, como llegó a decir, el que según ella “es el reino de los derechos humanos, es un modelo que asume como prioridad el ser garante de la satisfacción de las necesidades humanas de nuestro pueblo”.
Oposición con valentía y sin “guabineo”
El constituyente Ojeda por su parte, resaltó los gestos de amplitud que ha tenido el presidente de la República, Nicolás Maduro, al haber abierto las compuertas del diálogo y encuentro a todos los sectores del país.
“Pero los partidos de la oposición están corriendo un gran riesgo por estar movidos por el cálculo, por estar en un sempiterno guabineo y no salir a deslindarse con determinación y claridad de los focos violentos y delictivos que se han producido los últimos días”, resaltó el constituyente.
“En la vida hay que asumir posiciones con coraje, por más riesgos que se corran ante la crítica de los radicales. Deben plantarse las botas bien puestas, salir al frente y decir que condenan los actos violentos, si de verdad no están de acuerdo con esas prácticas”, resaltó el también diputado y vicepresidente de la Comisión Permanente de Cultos y Régimen Penitenciario de la AN.
Actos delictivos nunca han sido opción política
Ojeda indicó que la oposición no es un grupo homogéneo. “Hay una minoría radical, que no entiende ni conoce los procesos democráticos, que actúa por arrebatos, desprecia a la otredad, pero hay una gran mayoría de esa oposición que es democrática, que sí asume la visión de un camino electoral democrático”.
“Estar quemando y destruyendo no son argumentos válidos para nada ni nadie, el que tenga inquietudes sobre el funcionamiento de la sociedad que plasme sus ideas en papel, haga su proyecto, dibuje y describa su modelo de sociedad y se vaya por el país profundo, por las ciudades y los pueblos a convencer gente, a sumar voluntades. Eso sí requiere de valentía y determinación. No los actos vandálicos que hemos visto, no son ni serios, ni acciones políticas ni gestos valientes”, resaltó el diputado William Ojeda, quien aseguró que las protestas son válidas, incluso positivas en una democracia, pero nunca los actos delictivos.
