El presidente electo de Sudáfrica, Jacob Zuma, tomará mañana posesión de su cargo para iniciar su segundo y último mandato como jefe del Estado, tras el triunfo de su partido en las elecciones generales del pasado 7 de mayo.
La ceremonia tendrá lugar en la sede del Gobierno sudafricano en Pretoria, los Union Buildings, y contará con la presencia de jefes de Estado y de Gobierno de toda África y de representantes de los BRICS (Brasil, Rusia, la India o China), club de las principales economías emergentes del mundo.
Entre ellos, destacan el vicepresidente brasileño, Michel Temer, y el primer ministro saliente indio, Manmohan Singh.
La presidenta de la Unión Africana y exesposa del propio Zuma, Nkosazana Dlamini-Zuma, y el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, estarán también entre los asistentes, anunció hoy el Gobierno sudafricano en un comunicado.
El nuevo Parlamento salido de los comicios eligió este miércoles a Zuma como jefe del Estado, con la mayoría absoluta del oficialista Congreso Nacional Africano (CNA), que lidera el presidente electo.
El CNA obtuvo un 62 por ciento de los votos en las elecciones generales del 7 de mayo, seguido por la Alianza Democrática (AD) con un 22 por ciento.
El líder del CNA -que llegó a la Presidencia en 2009- regirá durante otros cinco años los destinos del país, cuya Constitución no permite a los presidentes exceder los dos mandatos.
La primera legislatura de Zuma ha estado marcada por el bajo crecimiento económico, el elevado desempleo y los escándalos de corrupción.
En un informe publicado en marzo, la Defensora del Pueblo, Thuli Madonsela, pidió a Zuma que devuelva parte del dinero público usado en la reforma de su residencia privada, en la que gastó más de 15 millones de euros y que justificó en necesidades de seguridad.
El mandatario electo, de 72 años, sigue la tradición zulú, practica la poligamia y tiene actualmente cuatro esposas.
Además, el líder sudafricano es conocido por su estilo directo y popular sus declaraciones polémicas.
Zuma pasó diez años detenido en las cárceles del régimen segregacionista del "apartheid" impuesto por la minoría blanca hasta 1994, a causa de sus actividades contra el racismo institucionalizado en las filas del entonces clandestino CNA.EFE