Lo Último

.

.

jueves, 11 de agosto de 2011

Presidenta india deniega el perdón a condenados por asesinato de Rajiv Gandhi

EFE-La presidenta de la India, última instancia decisoria sobre la pena de muerte en el país, ha rechazado una petición de clemencia para los tres condenados por el asesinato del primer ministro Rajiv Gandhi, informó hoy una fuente oficial.

"La presidenta (Pratibha Patil) rechazó la petición de clemencia la semana pasada", dijo a la agencia IANS un portavoz presidencial.

Los condenados, vinculados a la guerrilla tamil e identificados como Murugan, Santhan y Perarivalan, fueron sentenciados a la pena capital en 1999 por su participación en el asesinato de Gandhi, muerto en un atentado suicida en el sur de la India ocho años antes.



El rechazo presidencial a la clemencia en favor de los tres condenados por el asesinato de Gandhi se produce después de que el Tribunal Supremo confirmara ayer el mismo castigo para el paquistaní Mohamad Ashfaq.

Militante del grupo terrorista islámico Lashkar-e-Toiba (LeT), Ashfaq fue condenado a la pena capital por su implicación en el ataque contra el Fuerte Rojo de Delhi en 2000, que causó tres muertos.

Según la prensa local, el Ministerio indio del Interior ha recomendado a la presidenta Patil que también rechace una petición de clemencia por este caso.

Otros condenados a la pena capital de alto perfil son el único terrorista capturado vivo durante el asalto de Bombay de 2008, Mohamed Ajmal Amir Qasab, y el planificador de un ataque armado contra el Parlamento indio en 2001, Mohamed Afzal.

La última ejecución en la India tuvo lugar en 2004 pero tras siete años de moratoria de hecho sobre la pena de muerte, la presidenta comenzó el pasado mayo a denegar peticiones de perdón y dar vía libre al regreso de las ejecuciones.

En el gigante asiático, las penas deben ser primero confirmadas por el Tribunal Supremo y es en ese momento cuando los condenados pueden solicitar clemencia a la jefe de Estado, que escucha el consejo de Interior antes de ratificar la condena o conmutarla.