(EFE).- La Fiscalía de Milán pedirá al Tribunal Constitucional italiano que rechace el recurso presentado por el Parlamento, en el que se plantea un conflicto de competencias contra el Tribunal de Milán, encargado de juzgar al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, por el llamado caso Ruby.
En un comunicado emitido hoy, el fiscal de Milán Edmondo Bruti Liberati explicó que la Fiscalía se constituirá como parte ante el Constitucional, que está llamado a decidir sobre el conflicto de competencias planteado por ambas cámaras del Parlamento italiano contra el Tribunal de Milán y en el que abogaban por que sea el Tribunal de Ministros el que se ocupe del caso
El objetivo de la Fiscalía es lograr que el juicio siga adelante en el Tribunal de Milán y que el caso no pase al Tribunal de Ministros, como desea la mayoría política en el poder.
La primera en plantear el conflicto de competencias ante el Constitucional fue la Cámara de los Diputados, que el pasado 5 de abril aprobó una propuesta en esa dirección presentada por el partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), y otros grupos de la mayoría gubernamental.
Al recurso presentado por la Cámara de los Diputados se sumó el pasado 14 de septiembre el Senado, después de aprobar una iniciativa en la misma línea.
En ese recurso, promovido por la mayoría gubernamental en el Parlamento, se sostiene que el Tribunal de Milán no tiene competencia para juzgar a Berlusconi por cargos de abuso de poder, basados en la llamada telefónica que hizo el primer ministro el 27 de mayo de 2010 para sacar de una comisaría a la joven marroquí, conocida como Ruby R., que había sido detenida por robo.
Dado que Berlusconi, según defiende su partido, actuó por “motivos institucionales” al realizar esa llamada pensando que era la sobrina del entonces presidente de Egipto, Hosni Mubarak, debe ser el Tribunal de Ministros el que se encargue del caso y, por tanto, se ha de plantear el conflicto de atribuciones.
El pasado 18 de julio, el Tribunal de Milán rechazó inhibirse del caso Ruby, como exigieron los abogados de Berlusconi mediante dieciséis alegaciones, y dispuso la apertura de la fase oral del juicio para el próximo 3 de octubre.