(Reuters) – La aerolínea alemana Lufthansa intenta sacar provecho del buen desempeño de la economía latinoamericana en momentos en que su negocio europeo se ve golpeado por la crisis económica, nuevos impuestos y negociaciones salariales.
En los últimos meses, Lufthansa ha abierto rutas en la región en países que considera “claves” y mantiene una alianza con Avianca-Taca para operar rutas con menor demanda.
“Queremos desarrollar nuestro negocio en Latinoamérica porque es una región que ha capeado con relativa tranquilidad la crisis económica y crece a buenas tasas”, dijo a Reuters el vicepresidente de Lufthansa para las Américas, Jürgen Siebenrock.
Tras la aprobación en Chile el miércoles de la fusión de la chilena LAN y la brasileña TAM , analistas opinan que Lufthansa buscará participar de la empresa como una forma de liderar los destinos a Latinoamérica desde Europa.
Siebenrock, de visita en Venezuela, señaló que la aerolínea busca asentarse con fuerza con distintas rutas en Brasil, donde en el 2014 se llevará a cabo la Copa del Mundo y dos años después los Juegos Olímpicos.
“Queremos ser parte de ello”, dijo el ejecutivo y calificó a la región como un “mercado estratégico” para Lufthansa, la aerolínea más grande de Europa y que opera 76 vuelos semanales a cinco destinos sudamericanos.
Recientemente, la línea aérea revisó sus previsiones de beneficio operativo para este año y descartó lograr el objetivo de superar los 876 millones de euros del 2010.
Por otro lado, Siebenrock aseguró que, a diferencia de otras firmas, no tienen problemas en repatriar sus dividendos desde el país sudamericano pese al estricto control cambiario vigente desde el 2003.
“Trabajamos de acuerdo a las reglas y tenemos un buen diálogo con las autoridades. No tenemos problemas”, detalló.