A horas de su debut en el US Open, el número tres del mundo, el suizo
Roger Federer se cruzó con
Michael Jordan, una leyenda viviente de la NBA y no dudó en fotografiarse junto a él.
Sin duda, una selfie entre uno de los mejores tenistas de la historia y uno de los más grandes basquetbolistas causó furor en las redes sociales.
Federer, quien
llega como favorito por su título en el Masters 1000 de Cincinnati, arrancará esta noche su participación ante Marinko Matosevic.