(Madrid, 14 de enero EFE).- El Gobierno español consideró hoy que “Cataluña no necesita elecciones”, sino que se atienda “a los problemas de los ciudadanos”, algo a lo que, a su juicio, ha renunciado el presidente catalán, Artur Mas.
Esta fue la reacción del portavoz del Gobierno español, José Luis Ayllón, a la convocatoria de elecciones anticipadas autonómicas por Mas para el 27 de septiembre próximo.
Ayllón, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes (Parlamento) y quien ha asumido las funciones de portavoz del Ejecutivo, recalcó, en declaraciones a Efe, que el adelanto de las elecciones ocho meses sobre la fecha prevista evidencia que Artur Mas “ha dado por terminado su tiempo de gobierno”.
Asimismo, opinó que el adelanto electoral es “la mejor prueba de cargo” de que el presidente de la Generalitat “no tiene ningún interés en los problemas de los catalanes ni ninguna capacidad para resolverlos”.
Mas, de la formación nacionalista conservadora CiU, acordó anticipar los comicios con el líder de la formación independentista de izquierda y republicana ERC, Oriol Junqueras, su principal socio en la consulta soberanista simbólica celebrada el 9 de noviembre pasado.
Mas, de la formación nacionalista conservadora CiU, acordó anticipar los comicios con el líder de la formación independentista de izquierda y republicana ERC, Oriol Junqueras, su principal socio en la consulta soberanista simbólica celebrada el 9 de noviembre pasado.
Estas serán las terceras elecciones en Cataluña en menos de cinco años y su celebración coincide con el primer aniversario de la convocatoria por parte de Mas de una consulta soberanista sobre Cataluña, que el Gobierno español recurrió ante el Tribunal Constitucional, que la suspendió, pese a lo que el jefe del Ejecutivo catalán llevó a cabo una consulta alternativa.
Serán las terceras elecciones autonómicas en menos de 5 años, tras las de noviembre de 2010 y las anticipadas de 2012, en las que se impuso el actual presidente catalán, Artur Mas (CiU).
El intenso debate soberanista que se vive en Cataluña en los últimos años y la falta de mayorías sólidas ha provocado que las dos legislaturas de Artur Mas apenas hayan superado los dos años cada una, sin materializar ni el pacto fiscal ni un referéndum en toda regla sobre la independencia, como pretendía él.
La pasada semana, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) indicó que aprecia indicios de que el presidente catalán pudo incurrir en un delito de desobediencia al no acatar la orden de suspensión de la consulta soberanista alternativa del 9 de noviembre pasado .
La consulta había sido suspendida por el Tribunal Constitucional tras admitir a trámite un recurso presentado por el Gobierno español, que la considera ilegal y anticonstitucional
El tribunal catalán explicó que admitió a tramite las querellas y denuncias por dicha consulta e investigar a Mas y a las consejeras Joana Ortega e Irene Rigau por presunta desobediencia al Constitucional.