El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon dictó este miércoles en Estocolmo la conferencia magistral que lleva el nombre de Dag Hammarskjöld.
En sus palabras, pronunciadas en el Ayuntamiento de la capital sueca, Ban señaló que el mundo cambia dramática y rápidamente y que la responsabilidad de la ONU es hacer de él uno mejor, donde se pueda construir un paisaje de oportunidades y paz, al tiempo que se vencen injusticias persistentes como el odio y el hambre.
"Estamos más conectados que nunca, más personas viven en las ciudades, están surgiendo nuevas potencias económicas, y hoy se triplican la cantidad de Estados que pertenecían a la ONU en los tiempos del Hammarskjöld."
Al propio tiempo señaló que surgen nuevas y graves amenazas como el cambio climático y retos viejos como los desplazamientos masivos, y otros nuevos como el terrorismo.
En el enfrentamiento de todos estos obstáculos, dijo que el ejemplo de Hammarskjöld sigue siendo una guía de acción.
De Suecia, la patria del segundo Secretario General, Ban solicitó la permanencia de su solidaridad generosa con los refugiados y migrantes, mantener su liderazgo en la construcción de un mundo sostenible, ayudar a mantener la premisa de que no puede haber desarrollo sin paz y asistir a la ONU a reformarse para operar en el entorno del Siglo XXI.
Durante su presencia en Estocolmo, además de dictar la conferencia, Ban fue recibido por el primer ministro sueco. Stefan Löfven.
