AFP) – El gobierno de Estados Unidos donó 2,5 millones de dólares a Costa Rica para mejorar la capacidad de respuesta de sus entidadesjudiciales frente al narcotráfico y otras formas del crimen organizado, anunció este martes la embajada estadounidense en San José.
La embajadora Anne Andrew dijo en conferencia de prensa que los fondos corresponden al programa “Desafío Donación”, que es parte de la Iniciativa Centroamericana de Seguridad Regional (Carsi) con que Washington respalda los programas de seguridad en Centroamérica.
El anuncio lo hizo Andrew tras una reunión con las máximas autoridades judiciales y de seguridad del país, entre ellos el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Luis Paulino Mora; el fiscal general Jorge Chavarría; y el ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora.
Los proyectos financiados con la donación “reflejan el énfasis que pone Estados Unidos en brindar asistencia que apoye la transparencia, la rendición de cuentas y la cooperación entre distintas instituciones”, apuntó Andrew.
La representante diplomática recordó que Costa Rica, como otros países centroamericanos, se está convirtiendo en un centro importante de operación para los carteles del narcotráfico, lo que hace “más crítica” la necesidad de asistencia financiera para los programas de lucha contra el crimen organizado.
También se emplearán en dar capacitación a fiscales, jueces y otros funcionarios judiciales, así como en mejorar el sistema informático y perfeccionar las bases de datos sobre el crimen organizado, que serán compartidas entre instituciones judiciales y policiales.Por su parte, el magistrado Mora precisó que los fondos servirán, entre otros propósitos, a la construcción y equipamiento de un centro de intervenciones telefónicas, el cual estará funcionando dentro de dos meses.
Tras hacer el anuncio de la donación, Andrew insistió en la importancia de que se permita atracar en puertos costarricenses a los barcos estadounidenses que participan en operaciones marítimas contra el narcotráfico.
La semana pasada, un barco de guerra de Estados Unidos no pudo atracar en el caribeño Puerto de Limón para descargar un decomiso de drogas debido a que el Congreso se enfrascó en una discusión y no llegó a votar el permiso para el atraque, que exige la Constitución de este país.