Unas 40 explosiones se registraron en el volcán Tungurahua, en el centro de los Andes de Ecuador y, aunque su fuerza ha disminuido, no se descarta un incremento repentino de la actividad del coloso, informó el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
"En las últimas horas las explosiones han disminuido en tamaño, sin embargo, el nivel de actividad del volcán se considera como moderado a alto y no se descarta un posible incremento repentino de la actividad con la generación de flujos piroclásticos" o rocas incandescentes, precisa el último informe del IG.
Además, en 24 horas se han registrado unos 28 episodios de tremor o temblores asociados a la constante emisión de gases y ceniza, así como 77 sismos leves relacionados con el movimiento de fluidos en el interior del edificio volcánico.
Una de las fuertes explosiones registradas este domingo, precisa el informe, generó una columna de gas y ceniza que ascendió 2,5 kilómetros de altura sobre el cráter, como una nube que por efecto del viento se dirigió al noroeste.
Se reportó caída de ceniza en algunos poblados cercanos como Bilbao, Cusúa, Pillate, El Manzano y Choglontus, mientras que algunas explosiones estuvieron acompañadas de fuertes ruidos, como cañonazos.
El actual comportamiento del Tungurahua corresponde a un último pulso de gran actividad que empezó a finales de julio.
De 5.016 metros de altitud y situado a unos 180 kilómetros al sureste de Quito, este volcán inició su proceso eruptivo en 1999 y desde entonces se han intercalado periodos de gran actividad con lapsos de relativa calma.
En Ecuador hay más de medio centenar de volcanes, de los que los más activos son el Tungurahua, el Reventador y el Sangay.