La defensora del pueblo, Gabriela Ramírez, se refirió a los casos de las víctimas del 11 abril de 2002, y sobre los detenidos por los mismos hechos, resaltando que los organismos de adminitración de justicia en el país deben tener como objetivo fundamental, el repesto y la garantia de los derechos humanos, sin permitir la impunidad.
“No puede existir la impunidad, hay una sentencia firme que pesa sobre esta persona, actualmente tengo entendido que se está pidiendo una medida humanitaria. La Defensoría que siempre está atenta ante estos llamados públicos, ha visitado permanentemente a las personas en los centros de reclusión, y en los casos que nos ocupa ha habido una atención médica”.
En cuanto al aporte de nuevos elementos, señaló “La decisión esta en manos de los tribunales, pero si debo destacar que los delitos y crímenes que se cometieron los considera nuestra Constitución como delitos de lesa humanidad, por lo cual no puede ser motivo de amnistia ni de indulto, pues la Constitución blinda los derechos humanos”.
La enfermedad de Simonovis “no es terminal”
“Entiendo por las informaciones y por las ultimas visitas, que es una enfermedad de osteoporosis, que puede tener distintos grados, pero no se tata de una enfermedad terminal, es el juez quien tendrá que profundizar, pero la Ley es muy clara para la medida humanitaria”, acotó Ramírez al referirse al caso de Ivan Simonovis.
“Debe existir ponderación y equilibrio siempre respetando los derechos humanos la garantía y el resguardo de los mismos, eso lo que nos va a permitir que un funcionario uniformado del Estado, cumpla su misión con dedicación y con el mandatos que le impone nuestra constitución”, agregó.