EFE-Un puma que al parecer escapó de un restaurante donde permanecía en cautiverio mantiene preocupados a los pobladores de una comunidad cercana a Managua, informó hoy el Zoológico Nacional de Nicaragua.
El puma fue visto la noche del jueves en San Pedro, a 15 kilómetros al sureste de Managua.
"Lo primero que hicieron los pobladores fue llamarnos, para ver si se nos había escapado un puma, entonces fuimos a buscarlo inmediatamente", dijo a Efe Marina Argüello, directora del Zoológico Nacional.
Pero la búsqueda no dio frutos. El puma aparentemente cruzó la Carretera a Masaya, una de las más transitadas de Nicaragua, y nadie volvió a verlo.
"Posiblemente fue criado (en cautiverio) desde pequeño, entonces tal vez no es tan agresivo, pero le recomendamos a la población no correr cuando lo vean, no gritar, si es posible ahuyentarlo con sonidos de metal", expresó Argüello.
Tanto los administradores del zoológico, como la Policía Nacional y el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena), sospechan que el puma se escapó del restaurante exótico "San Juan de la Selva", que tiene antecedentes en casos similares, aunque en esta ocasión no ha confirmado ni negado tal extremo.
Argüello recordó que en 2004 se les escapó un jaguar y posteriormente dos pumas adultos, similares al extraviado.
La comunidad donde el puma fue avistado está próxima al zoológico y al restaurante de donde se habría escapado.
Las autoridades del Zoológico Nacional esperan encontrar al felino antes de que un poblador asustado le quite la vida.
El Marena considera a los pumas como animales en peligro de extinción.
En diciembre de 2009 el Marena y la Dirección de Investigaciones Económicas (DIE) decomisaron al dueño del restaurante, el italiano Vittorio Tassinari, de 68 años, tres pumas, un jaguar y un zorro luego de verificar que él no contaba con permiso para mantener cautivos a esas especies en peligro de extinción.
En el restaurante, ubicado en el kilómetro 5 de la carretera que une Managua con Masaya, se decomisaron un puma y un jaguar y en la vivienda de Tassinari, sobre el kilómetro 15,4 de la misma vía, dos pumas y un zorro, de acuerdo con reportes de la prensa nicaragüense que citan a fuentes oficiales.
En esa ocasión, la esposa de Tassinari, María García, dijo que las autoridades sabían que tenían en cautiverio esos animales en el restaurante y en su vivienda.