Consumir una ciruela aporta 60 kcal, por lo que es una fruta perfecta para incorporar en dietas de adelgazamiento, ya que es ligera y aporta poca carga calórica al organismo. Además, las ciruelas son ricas en antocianos, sobre todo en las variedades de colores rojos y morados, unas sustancias que tienen grandes propiedades antioxidantes, ayudando a frenar el efecto nocivo de los radicales libres y a mantener la piel cuidada.
Es además una de las frutas más beneficiosas para combatir el estreñimiento, ya que gracias a su gran aporte en agua, fibra y sorbitol, provoca un efecto laxante que ayuda a regular el tránsito intestinal. Por su elevado contenido en potasio y su mínimo aporte en sodio, podemos decir que es un alimento diurético, que contribuye a la eliminación de líquidos. Además, el potasio es un mineral que interviene directamente en el control del sistema nervioso, por ejemplo con la actividad del corazón y el desarrollo de los músculos.
Fuente: msn.es