AP) — El gobierno de Bolivia elevó en 300% el precio interno del barril de petróleo, de 10 a 40 dólares, para incentivar a las petroleras a invertir y detener la caída en la producción que ha puesto en apuros el abastecimiento interno.
El ajuste se pagará en notas de crédito fiscal y no afectará el precio de los carburantes que está subvencionado, explicó el viernes presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (Ypbf), Carlos Villegas.
“El precio internacional del petróleo a la fecha se encuentra muy por encima del precio de referencia para el mercado interno, aspecto que representa un desincentivo para la producción de mayores volúmenes de petróleo y sobre todo para la exploración de nuevas reservas de hidrocarburos líquidos”, señala el decreto.La medida entrará en vigencia el 20 de mayo cuando el Ministerio de Hidrocarburos y Energía reglamente el decreto aprobado el miércoles.
Mientras en el mercado internacional el precio del crudo era el viernes de 103,9 dólares por barril, desde hace ocho años el precio oficial en Bolivia es de 27 dólares aunque las empresas reciben en efectivo 10 dólares porque el resto cubre costos de transporte e impuestos.
Con la nueva medida el gobierno reconocerá un precio de 40 dólares por barril de los cuales 30 serán pagados en notas de crédito fiscal, según el decreto. Las petroleras podrán descontar sus impuestos con dichas notas.
La norma también obliga a las petroleras a presentar a Ypbf su plan de inversiones.
La producción de gas natural en campos marginales o pequeños será exportada a Brasil y Argentina donde tienen mejor precio que en el mercado local, otro de los incentivos aprobados.
Bolivia produce sobre todo gas natural, que es el primer producto de exportación, pero la producción de petróleo bajó de 50.046 barriles por día en 2005 a 44.435 en 2011 mientras la demanda interna está al tope y crece a diario. Una parte sale de contrabando a países vecinos. El agua embotellada cuesta más que la gasolina regular cuyo precio es de 0,53 dólares el litro.
El país importa diesel de Venezuela y gas licuado de Chile para su mercado interno. La subvención de carburantes es una pesada carga para el Estado y este año llegará a 755 millones de dólares.
La producción de líquidos está estancada porque muchos pozos de gas alcanzaron su tope o están declinando.
El gobierno no ha tenido éxito en su campaña para que las petroleras incrementen sustancialmente sus inversiones para buscar nuevas reservas desde que nacionalizó los hidrocarburos en 2006.Morales tuvo que dar marcha atrás hace poco más de un año cuando un aumento de 74% en el precio de los carburantes encendió una revuelta popular que puso en riesgo a su gobierno.
La medida obligó a una decena de empresas entre ellas Repsol, Petrobras, BG y Total a renegociar sus contratos para pasar a convertirse en operadoras de Ypfb. Petróleos de Venezuela (Pdvsa) se asoció con Ypfb para buscar reservas.
El gobierno anunció inversiones por 2.050 millones de dólares este año, 1.077 serán invertidas por las petroleras y el saldo por la estatal, según informes oficiales.
Repsol, una de las mayores socias del gobierno, dijo que estudia la norma y esperará el reglamento para pronunciarse.