AFP) La guerrilla colombiana de las Farc dijo este sábado que llegará sin “agendas paralelas ni ocultas” a las conversaciones de paz con el gobierno de Bogotá en noviembre en La Habana, y advirtió que ambas partes deben evitar enviar señales que creen “confusión”.
“No hay agendas paralelas ni ocultas por parte de la insurgencia”, dijo el grupo guerrillero en un correo electrónico enviado a la AFP en La Habana.
El grupo pidió además que los negociadores que elaboraron la agenda de conversaciones les den “una explicación objetiva del documento al conjunto de sus equipos de trabajo. Esto es fundamental para que comencemos con buen entendimiento y para evitar que desde las vocerías de las partes surjan mensajes que generen confusión”.
La organización rebelde afirmó que “además de la claridad de los voceros respecto a la agenda, se requeriría también que la gran prensa” colombiana divulgue sin “censura y distorsión” los puntos de vista de las Farc (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, comunistas).
El gobierno de Juan Manuel Santos y las Farc instalaron la mesa de conversaciones en Oslo el 18 de octubre, pero las negociaciones del acuerdo de paz se llevarán a cabo en La Habana a partir del 15 de noviembre con una agenda de cinco puntos: tema agrario, garantías para la participación política, drogas ilícitas, abandono de las armas y víctimas.
Las Farc dijeron que la mesa de conversaciones deberá “abordar el terrorismo de Estado como factor causal, esencial, del fenómeno” de la violencia y las víctimas del conflicto colombiano, que se arrastra desde hace medio siglo.
Dar respuesta satisfactoria a las miles de víctimas del conflicto y sus familias será uno de los puntos más complejos del proceso de paz, según expertos.
Se estima que el conflicto interno colombiano –en el que han participado diversas guerrillas de izquierda, grupos paramilitares de ultraderecha, narcotraficantes y agentes del Estado– ha dejado al menos 600.000 muertos, unos 15.000 desaparecidos y 3,7 millones de personas desplazadas por la violencia.
La delegación del gobierno la encabeza el ex vicepresidente colombiano Humberto de la Calle, mientras que la de la guerrilla la dirige Iván Márquez, número dos de las Farc.