El presidente de la República Nicolás Maduro anunció este lunes que el decreto que regulará los precios de los carros será promulgado mañana, debido a que le hará pequeñas modificaciones. Así lo afirmó desde el Palacio de Miraflores, acompañado del ministro de Industrias Ricardo Menéndez y el Ministro Alejandro Fleming.
Temprano, el jefe de Estado anunció que firmará este lunes un decreto que permitirá equilibrar y sanear el mercado de vehículos y disminuir su costo, como parte de la ofensiva económica que emprende el Gobierno frente a la especulación y el alza de los precios.
El Primer Mandatario, con carpeta en mano, aseguró que este nuevo decreto ya está realizado y listo para ser firmado. Sin embargo, aseguró que no será promulgado todavía debido a que hay nuevas propuestas a tomar en consideración.
“Listo el decreto para regular y fortalecer el mercado de vehículos, bajar los precios de carros ensamblados en Venezuela y de los importados y de los carros usados. Pero, nos vamos a dar 24 horas para hacer unos ajustes porque han llegado nuevas propuestas bien beneficiosas para la familia venezolana”, aseguró el Maduro.
Asimismo, continuó explicando más detalles acerca de la legislación y detalló que para el año 1998 el promedio de habitantes por carro era de 10.9, mientras que en la actualidad el promedio, a juicio de Maduro es de 5 personas por carro.
El Presidente criticó el costo de los carros tipo Sedan, ensamblados en Venezuela que utilizan partes que han sido importadas con dólares preferenciales y son vendidos en 500 mil bolívares.
Implicaciones que tendrá el Decreto automotriz
En primer lugar: el Jefe de Estado informó que durante el día de mañana se reunirán los ministros Fleming y Menéndez con los dueños de las ensambladoras para informarles que el Gobierno fiscalizará esta industria y será la que decrete el precio de los vehículos ensamblados en el país.
“Tomamos el control del proceso de producción de vehículos y fiscalización del vehículo, allívamos a establecer precios justos de referencia de los producidos y ensamblados en el país. Se le pondrán la ganancia al ensamblador y se deberá colocar la etiqueta de precios justos garantizado, en la puerta de la fábrica”, explicó el Presidente.
En segundo lugar: Maduro destacó que nadie podrá condicionar la venta a ninguna tasa, ni preferencia, ni a ningún concesionario de estos vehículos, debido a que estos carros deben ir a parar a las manos de quienes realmente lo necesitan.
El Primer Mandatario aseguró que con este punto van a “controlar desde la punta de fábrica, hasta la puerta de venta” todo el proceso de producción de los automóviles.
En tercer lugar: Maduro indicó que todas las ensambladoras de vehículos del país deberán realizar un reporte ante el los Ministerio de Industrias y Comercio de cuál es su producción semanal y de las necesidades que tengan.
Maduro declaró que con esta medida pretenden apoyar a las ensambladoras y en caso de que lo necesiten, “mantenerlas o ampliarlas” otorgándoles más divisas para que siga creciendo la producción automotriz nacional.
En cuarto lugar: el Presidente aseveró que el precio de venta de los vehículos del mercado secundario, es decir, los vehículos usados no podrá superar el monto de veta de los carros nuevos.
“Los vehículos del mercado secundario no podrán exceder el precio referencial de los vehículos nuevos”, recalcó Maduro y pidió la máxima colaboración de toda la población en este punto.
En quinto lugar: se establecerá un régimen especial de importación de vehículos por parte de particulares que abran cuentas en moneda extranjera en los bancos públicos del Estado.
“Las personas que abran una cuenta en moneda extranjera en un banco del estado podrá hacer la solicitud de la licencia para adquirir un vehículo importado nuevo”, informó.
El Gobierno de Maduro lleva adelante una ofensiva contra los altos precios y la escasez tomando controvertidas medidas como la intervención de establecimientos comerciales para bajar los precios en porcentajes del 50% o más.
El presidente ha asegurado que se han detectado ventas con una sobrefacturación del 1000% con relación al precio de costo y comerciantes que recibieron dólares al precio oficial por parte del Estado (un dólar=6,3 bolívares) y venden sus productos con base en el valor del dólar paralelo ilegal, que puede ser 10 veces más caro.
Con información de EFE
