Si hay una firma capaz de sorprender con cada nuevo lanzamiento, esa es la taiwanesa HTC. Sus terminales, cuidados hasta el mínimo detalle, suelen acaparar premios y reconocimientos en todo el mundo, tanto por los materiales usados en su fabricación como por las prestaciones y el software de los dispositivos. De hecho, la capa de programación queHTC coloca sobre el sistema operativo Android (HTC Sense) es, sin duda, la mejor del mercado, con funciones que realmente enriquecen (en lugar de entorpecer) la experiencia de uso.
Ya en sus últimos terminales (especialmente en el ONE M8), HTC había destacado por la atención puesta en la fotografía. Tanto en las capacidades de la cámara como en el software, con funciones tan sorprendentes como la posibilidad de enfocar a voluntad el sujeto o el fondo de la imagen con el solo toque de un dedo sobre la pantalla. O con el sistema Zoe que, sin que el usuario tenga que hacer absolutamente nada, crea automáticamente pequeños vídeos con las imágenes recién tomadas con el móvil.
Pero HTC ha querido ir más allá, y acaba de mostrar dos nuevos productos, un móvil (HTC Desire Eye) y una pequeña y revolucionaria cámara (HTC Re), con los que pretende (y seguramente consiga) ponerse en cabeza en la loca carrera de los fabricantes de tecnología por conseguir la mejor experiencia fotográfica móvil.
Cámara Re: sin pantallas de por medio
Es el primer fruto del trabajo de la nueva división de Personal Computing de HTC. Y se trata de una pequeña cámara especialmente diseñada para capturar imágenes y vídeos de gran calidad, pero sin necesidad de tener el teléfono en la mano. No es una cámara de acción, sino social, especialmente pensada para capturar y compartir nuestros momentos preferidos.
En palabras de Antonio Muñoz Tallón, director de Producto de HTC, «la pantalla del móvil se entromete, siempre, entre el usuario y el sujeto de la foto o del vídeo. Por ejemplo, en vez de ver un concierto directamente, nos hemos acostumbrado a mirarlo a través de la pantalla del móvil, mientras lo grabamos. Y lo mismo sucede con fiestas, reuniones de familia, cumpleaños...»
La nueva cámara Re es la solución. Se trata de una cámara pequeña (96,7 x 26,5 mm.), discreta, ligera (65,5 g.), prácticamente invisible y que se puede llevar a todas partes. Se activa con solo cogerla, gracias a un sensor de agarre incorporado. Es muy ergonómica y fácil de sujetar y su uso es extremadamente simple. Con un solo clic en su único botón, hace una foto. Si se mantiene pulsado el botón durante dos segundos, inicia la grabación de vídeo.
La cámara cuenta con un sensor de 16 megapíxeles y una lente Ultra gran angular de 146 grados, lo cual asegura que, aunque no miremos a la pantalla del móvil, no se escapará ningún detalle de la escena que estemos grabando.
También podremos grabar vídeos en cámara lenta a 96 frames por segundo. La apertura es f/2.8 y cuenta con una función Time Lapse, que nos permite dejar la cámara en un punto fijo durante minutos (u horas) para captar cómo cambia un escenario concreto con el paso del tiempo. En este modo es posible configurar el intervalo que deseemos entre foto y foto.
La cámara no lleva memoria interna, pero sí una ranura para tarjetas de memoria micro SD. Está incluída una tarjeta de 8 GB. Incorpora un micrófono HD y un pequeño altavoz.
La HTC Re es sumergible. Cuenta con la certificación IP57, lo que garantiza que se puede sumergir hasta un metro de profundidad por un tiempo de 30 minutos sin que la humedad penetre en su interior.
Todas las funciones de la cámara (incluído el Time Lapse) se pueden controlar a través del móvil, por medio de una app específica.
En cuanto a la batería, de 820 miliamperios, permite una autonomía de grabación de vídeo de una hora y cuarenta minutos o el disparo de 8.000 fotografías. Dispone de una base de carga sobre la cual la cámara se coloca de pie, con lo cual puede utilizarse de noche como un vigila bebés.
La nueva Re puede conectarse con cualquier dispositivo Android (a partir de la versión 4.3) o IOs (a partir de IOs 7). La conexión entre la cámara y el smartphone es a través de WiFi Direct. Para conectar ambos dispositivos, no hay más que ir a la lista de redes WiFi disponibles en el móvil y seleccionar la cámara. La HTC Re también se puede programar para que se conecte automáticamente a una red WiFi (por ejemplo a la de casa), para que nada más llegar suba directamente las fotos a Dropbox, Google Drive o YouTube. Entre los distintos accesorios (habrá más en el futuro), encontramos pinzas para fijarla a la ropa o, por ejemplo, a una bicicleta.
La nueva HTC Re, que podrá adquirirse en varios colores, estará disponible en España a finales de noviembre a un precio recomendado de 229 euros.
Desire EYE, nace el «video selfie»
La clara orientación hacia la fotografía de HTC se hace patente, también, en su nuevo terminal, HTC Desire EYE, especialmente pensado para sacar el máximo partido a sus dos cámaras (la frontal alcanza los 13 megapíxeles) y para el que la firma ha diseñado un nuevo software que podrá también descargarse en otros terminales de HTC.
El EYE es un terminal pensado para los selfies. Y no se trata solo de equipar al smartphone con una mejor cámara frontal, sino de dotar a esa cámara con nuevas funciones que mejoren la experiencia de los usuarios. Como por ejemplo la posibilidad de hacer "vídeos selfie", algo que HTC justifica ante las previsiones de incremento de videollamadas, que se multiplicarán por tres durante los próximos dos años. Y no se trata, tampoco, solo de hacer fotos, sino de comunicarlas de la forma más sencilla y rápida posible.
El nuevo EYE es el terminal tope de la gama Desire. Cuenta con una pantalla Full HD de 5,2 pulgadas, pesa 154 gramos y sus dimensiones son de 151,7 x 73,8 x 8,5 mm. El procesador es un Qualcomm Snapdragon 801 de cuatro núcleos a 2,3 GHz, la memoria RAM es de 2 GB y la de almacenamiento de 16 GB, ampliable con tarjetas micro SD.
La batería es de 2.400 miliamperios y las dos cámaras, trasera y delantera, son de 13 megapíxeles y ambas están equipadas con Flash Dual Led y autoenfoque con zoom. Es la primera vez que se equipa un flash dual y un zoom digital a una cámra frontal.
Pero, ¿qué se puede hacer con estos 13 megapíxeles de la cámara delantera? Pues en primer lugar, moverse libremente delante de ella, ya que la cámara cuenta con un sistema de seguimiento de caras capaz de seguir al sujeto siempre y cuando éste se encuentre dentro del campo de visión.
Pero no solo eso. La cámara puede seguir, al mismo tiempo, hasta cuatro caras diferentes, y presentarlas además en cuatro ventanas individuales, lo que hace posible, por ejemplo, llamadas de grupo en las que aparezcan en diferentes ventanas los rostros de todos los participantes. Esta función funciona, por ejemplo, con Skype y con otros servicios de streaming de vídeo. Para hacer los selfies, además, no es necesario tocar el móvil. Bastará con pronunciar una de estas tres palabras: "patata", "sonríe" o "foto", para que la cámara dispare automáticamente.
Otra interesante posibilidad es la de enviar, por vídeollamada, la pantalla del móvil, con todo lo que haya en ella en ese momento, desde un videojuego, para que el receptor de la llamada pueda ver, directamente en su teléfono, lo buenos que somos jugando, a cualquier aplicación cuyo funcionamiento o contenido queramos mostrarle a otra persona.
Durante una videoconferencia, además, también se podrá mostrar lo que están captando las dos cámaras (frontal y trasera) a la vez en una pantalla partida. Y también se podrán grabar «vídeos asíncronos», es decir, que podremos grabar primero un vídeo con la cámara principal y, una vez terminado, explicarlo en otro vídeo. El resultado aparecerá en una sola pantalla.
Lo mismo se puede hacer con un selfie convencional. A menudo, nuestra propia cara tapa lo que hay detrás, que no aparece en la foto.El nuevo EYE, sin embargo, permite hacer primero la foto de un paisaje, después un selfie y finalmente colocar nuestro retrato en cualquier parte de la foto principal, integrándola en el paisaje, no en una ventana aparte.
Otras posibilidades interesantes son, por ejemplo, la función de foto matón, que permite hacer cuatro disparos y mostrarlos en una única fotografía. O la función "Face fusion", que permite hacer "morph" entre dos fotos, por ejemplo dos retratos de personas diferentes, e ir transformando la primera en la segunda. El terminal cuenta incluso con una función que permite controlar, una vez hecha la foto, el "nivel de maquillaje" de la cara, aumentándolo o disminuyéndolo a voluntad.
Igual que la cámara Re, el nuevo HTC Desire EYE estará disponible en España a finales de noviembre. Su precio recomendado es de 549 euros.ABC