(Paraguay, 25 de septiembre. EFE) – Froilán Peralta, rector de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), la principal de Paraguay, renunció a su cargo y se entregó a la Justicia, después de que la Fiscalía ordenara hoy su detención y le imputara cargos por su presunta implicación en una trama de corrupción en la institución.
Peralta, que se encontraba en paradero desconocido desde el pasado domingo y cuya renuncia era pedida por miles de alumnos de la UNA acampados durante esta semana en el campus, fue imputado por inducción al cobro indebido de honorarios, informó la Fiscalía en un comunicado.
Poco después, el rector se personó en la sede del Ministerio Público, donde prestó declaración.
Al mismo tiempo, el Ministerio Público imputó a otros doce funcionarios del Rectorado y la facultad de Veterinaria de la UNA, todos acusados de cobro indebido de honorarios al haber sido nombrados como docentes sin contar con el perfil requerido, según el comunicado.
Antes de eso, el Consejo Nacional de Educación Superior (Cones) resolvió intervenir la Universidad, lo que supone iniciar una investigación en la institución.
Además, varias facultades de la UNA han sido allanadas por agentes de la Fiscalía paraguaya a fin de “resguardar las evidencias”, como computadoras y archivos, después de que esta madrugada los estudiantes detectaran a varias funcionarias tratando de sacar documentos del edificio del Rectorado, cercado desde el lunes por los universitarios.
Una de estas funcionarias, de la dirección de Talento Humano, fue detenida anoche mientras salía del Rectorado tratando de ocultar varios documentos a través de la “quema de archivos”, dijo a Efe Leonardo Gómez, estudiante de la Facultad de Derecho en la UNA.
La renuncia de Peralta se produce un día después de que la ministra de Educación, Marta Lafuente, declarara a los medios que el rector debía de renunciar cuanto antes debido a los presuntos hechos de nepotismo y corrupción de los que se le acusa.
Peralta está siendo investigado por la Fiscalía y por la Contraloría General de la República por unos presuntos hechos de corrupción y de contrataciones irregulares de sus familiares y amigos en la Universidad.
Coincidiendo con ello, los estudiantes de la UNA emprendieron a principios de esta semana una serie de movilizaciones y acamparon en el Rectorado para exigir la dimisión de Peralta.
La renuncia del rector fue celebrada en el campus por el alumnado allí acampado, aunque sus dirigentes señalaron que la dimisión del rector es solo un “primer paso”.
“Ahora mismo el ambiente acá es festivo. Pero este es recién el primer paso. Peralta debe responder ante la Justicia, y también el resto de decanos acusados de corrupción”, declaró a Efe Ricardo Villaverde, representante del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía de la UNA.
El representante señaló que ahora se requiere realizar cambios estructurales en la UNA para evitar situaciones parecidas.
“Necesitamos reformar el estatuto de la UNA para impedir que haya más nombramientos indebidos”, dijo Villaverde.
