El fabricante brasileño de implantes mamarios, pectorales, glúteos, testículos, pantorrillas y rostro, Silimed, aseguró que sus productos son “seguros” después de que su venta fuera suspendida en varios países por el descubrimiento de impurezas.
“Nuestros productos son seguros. No hay contaminación en los productos de Silimed, que son fabricados de acuerdo a las más altas normas de seguridad”, afirmó la compañía en un comunicado enviado a la AFP.
En su escrito, Silimed subrayó que suspendieron “voluntariamente” la comercialización de sus productos en el mercado europeo hasta que las autoridades sanitarias locales reciban su informe técnico oficial.
“El nivel de partículas encontrado es extremadamente bajo y conforme a todos los mercados”, añadió la empresa brasileña.
Silimed afirmó igualmente que en la Unión Europea “no hay criterios que definan los niveles de partículas, lo que puede conducir a un análisis absolutamente subjetivo”, antes de resaltar que la compañía -líder en Latinoamérica y la tercera empresa del mundo en el sector- opera desde hace 37 años en el mercado y está aprobada en 75 países.
Este jueves, la Agencia Nacional de seguridad de medicamentos y productos de salud de Francia (ANSM) recomendó “no utilizar esos implantes” por precaución.
De su lado, la agencia sanitaria británica también recomendó públicamente el miércoles no utilizar ninguno de los productos implantables de Silimed hasta nueva orden. El organismo precisó, sin embargo, que por el momento no hay indicios de riesgo para la salud de las personas que los usan, aunque se están haciendo pruebas en muestras.
Además, las autoridades sanitarias de Suiza y Australia ya tomaron decisiones similares.
Esta suspensión ocurre luego de una verificación de la fábrica brasileña por parte del certificador alemán TÜV Sud, que determinó “la presencia de partículas en la superficie de los implantes mamarios”.
TÜV Sud, encargado de la certificación de dispositivos médicos, anunció a las autoridades sanitarias europeas la suspensión temporal del registro CE a los productos del fabricante brasileño, prohibiéndole de hecho comercializarlos en Europa.
Esta medida preventiva de suspensión de venta de implantes en la Unión Europea ocurre cinco años después del caso de las prótesis mamarias fraudulentas de la fábrica Poly Implant Prothèse (PIP) en Francia, en el que se vieron involucradas 30.000 mujeres en el país europeo y miles en todo el mundo.
Fuente: AFP
