La escasez de recursos limita a capacidad de los equipos de emergencia que trabajan para aliviar las crecientes necesidades de los millones de sirios que han huido de la violencia en su país y se refugian en los Estados vecinos.
Así lo advirtió hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) y, al mismo tiempo, urgió a los donantes internacionales a apoyar sólidamente a los países de la región que acogen a esa población.
El coordinador del Equipo de Emergencia de la OMS en Amman, Jordania, Nada Al Ward, dijo que la migración a Europa podría aliviar parte de la carga que llevan estos países, aunque no mucho.
Ward explicó que el plan de salud para responder al desarraigo de sirios ha recibido apenas un 30% de los fondos que hacen falta para su implementación en 2015. "La magnitud de las necesidades aumenta. Han pasado más de cuatro años desde que inició la emergencia y vemos los mismos apremios sanitarios de 2011, pero en una escala mucho mayor, que incluye casos de trauma y graves daños mentales, enfermedades no contagiosas, necesidades de salud reproductiva", detalló Ward.
Este año, el personal de la OMS ha brindado tratamiento a más de 13,8 millones de personas en Siria y trabaja para garantizar el suministro de medicinas y suministros médicos básicos en los países de acogida, donde la cantidad de refugiados podría colapsar los sistemas de salud pública.
