Los nueve trabajadores de Consilux que se declararon en huelga de hambre cumplen dos días en ayuna frente a la embajada de Brasil para exigir que cancelen sus sueldos del último año y medio.
Betty Cardozo, una de los huelguistas, le pidió al embajador de Brasil y al Presidente Chávez que intercedan para resolver el problema.
Cardozo dijo que tenía nueve meses trabajando en el complejo habitacional Cayaurima y no había recibido ningún pago.
No hay comentarios:
Publicar un comentario