La Comisión Investigadora del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para Siria reiteró este martes que en ese país continúan cometiéndose violaciones graves, masivas y recurrentes de las garantías fundamentales de la población civil en medio de una persistente impunidad.
Al presentar su informe más reciente al Consejo, el presidente de la Comisión criticó la falta de acción internacional para detener las atrocidades cometidas por todas las partes del conflicto, que comenzó en marzo de 2011.
En una entrevista con Radio ONU, Paulo Pinheiro se refirió a la división del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
"Es lamentable que hasta ahora, un año después de la última discusión sobre una resolución vetada que consideraba enviar el caso de Siria a la Corte Penal Internacional y después de la resolución que menciona la necesidad de poner fin a la impunidad en Siria, el Consejo de Seguridad no haya sido capaz de abordar el tema", dijo.
Ante esta falta de respuesta, la Comisión propuso la creación de un tribunal “ad-hoc” para procesar los crímenes de guerra o de lesa humanidad cometidos en Siria.
Pinheiro citó una lista de abusos entre los que destacó la utilización de bombas de barril, ejecuciones masivas y violencia sexual.
Entre otros crímenes, el experto detalló que los combatientes del ISIS secuestran a mujeres y niñas en Iraq para luego venderlas en Siria como esclavas sexuales o como botines de guerra.
