Trabajadores de minas en Tinaquillo salen a la calle en defensa de sus empleos
Raúl Castellanos Latouche
Trabajadores de las empresas mineras instaladas en Tinaquillo, realizaron la tarde de este jueves una marcha con la finalidad de expresar su desacuerdo con la pretensión de la Gobernación del estado Cojedes de, por medio de un contrato, apoderarse de un 60% de la explotación de los recursos minerales que hasta ahora venían produciendo este sector.
Esta situación desde hace varias semanas tiene en zozobra a todas aquellas personas que tienen relación directa e indirecta con estas empresas, manifestando que son más de ochocientos trabajadores inmediatos y alrededor de cinco mil personas que de manera secundaria dependen de las minas. Sin embargo para algunos, es incuantificable la cantidad de gente que puede beneficiarse diariamente con la operatividad de este sector en Tinaquillo y fuera de los límites del municipio.
La Gobernación del estado Cojedes, coloca como excusa para la formalización del convenio con los mineros, el derecho a la vivienda creyendo apropiado garantizar el despacho de agregados de los minerales no metálicos extraídos en las minas ubicadas en el territorio del estado para el desarrollo de la Gran Misión Vivienda Venezuela.
No obstante, desde las empresas mineras se pudo conocer que ellos nunca se han negado a otorgar los recursos minerales necesarios para el avance de este programa gubernamental, evidenciando el aporte solicitado para este objeto, e incluso han accedido a donaciones que el propio gobierno regional y municipal direcciona a Consejos Comunales, instituciones educativas, deportivas y particulares, entre otras. Asimismo, cada empresa cumple con sus obligaciones de responsabilidad social, las cuales siempre van en beneficio de la colectividad en general.
Las alarmas se mantienen encendidas en estos centros de trabajo, en vista que las plantas de donde se extrae la arena, el granzón y la gravilla, desde hace algunos días se encuentran custodiada por grupos de la Guardia Nacional Bolivariana. También se sabe de constantes presiones psicológicas que reciben los directivos de las minas para que coloque definitivamente su firma en el documento propuesto por la Gobernación, situación que hasta ahora no han hecho los empresarios.
Manifiestan que el conjunto de cláusulas solo favorece a una de las partes, quedando los empresarios y trabajadores en minusvalía, configurada por ejemplo en la cláusula octava de ese convenimiento, el cual destaca que los acuerdos firmados pueden quedar deshechos de manera inmediata, cuando el minero no cumpla con sus obligaciones, de esa forma quedará nula la licencia para extraer y explotar la mina y la Gobernación del estado Cojedes, asumirá la administración y control absoluto de la mina.
Este escenario puso en alerta a los trabajadores de las organizaciones mineras, porque sienten la amenaza en sus espaldas y el peligro de la estabilidad de sus empleos y de la alteración de sus ambientes y climas laborales. Destacan que seguirán efectuando otras acciones hasta lograr la normalización de esta circunstancia tan incómoda e invita a la Gobernadora Érika Farías para que reflexione y desista de esta idea que perjudica a toda la población cojedeña.
