El arzobispo de Mérida, Baltazar Porras, consideró que los recientes ataques a las imágenes de la Divina Pastora y la Virgen de Coromoto en Lara, así como a la figura José Gregorio Hernández en Yaracuy, son producto de un “ensañamiento” violento, en el que ha estado presente una condena al discurso católico.
Aseguró que los ataques no son simples actos vandálicos, sino que tienen otra intencionalidad: “hay un ensañamiento, son varios ataques de forma coordinada, lo que indica que no fueron cometidos por algún desadaptado espontáneo“.
Dijo que la condena al discurso católico ha generado el camino de violencia y destrucción, que no es característico de una sociedad democrática, que debería dar cabida a las diversas formas de expresión.
Baltazar Porras consideró necesaria una clarificación de los hechos y que no queden en simple anécdota. Lamentó que cuando ocurre cualquier calificativo denigrante contra el oficialismo, las autoridades sí actúan de manera inmediata, y en los ataques a las imágenes religiosas no sea así.
Consideró que los ataques son consecuencia de la violencia generada por el discurso político, pero no descartó ninguna hipótesis, como que se trate de algún grupo cuyas creencias vayan contra las creencias de la Iglesia católica. “Pero vivimos en una sociedad tan politizada que parece que no hay límites en este aspecto, Dios quiera que no sea así”, agregó.
Vía El Nacional
No hay comentarios:
Publicar un comentario