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martes, 11 de octubre de 2011

Paiva: invertir en los bonos soberanos es una forma de salvaguardar los ahorros

El economista Antonio Paiva realizó algunas recomendaciones para poder invertir en la nueva emisión de bonos soberanos al 2026.

Tras la experiencia de la última emisión de bono, recomendó solicitar la cantidad exacta de US$3000 y no sus múltiplos. “Deben tener el valor en bolívares en el banco, inmovilizado hasta tanto se les otorgue el bono”, agregó durante una entrevista en el programa Aló, Ciudadano.
Explicó que la inversión en estos bonos “es una forma de salvaguardar los ahorros de los venezolanos en una moneda que no se está devaluando. Este Gobierno ha devaluado seis veces -el bolívar fuerte-, el promedio es más o menos el 65%. Eso es lo que explica que en este momento los precios de los productos de primera necesidad, los productos de la cesta básica y todos los bienes y servicios que consumimos los venezolanos están en una escalada demasiada elevada de precios”.

Estos bonos permiten, según Paiva, recoger la liquidez de la moneda nacional, sin embargo, advierte que el problema es que “eso, a la larga, el Gobierno lo revierte al torrente circulatorio y genera más cantidad de dinero en manos del público por menos cantidad de bienes y servicios que circulan y eso genera inflación”.

Acotó que el presupuesto de 2012 tiene una enorme distorsión al considerar el precio promedio del barril del petróleo en US$50 cuando este año ha rondado los 100 dólares. “Eso significa que cada vez que se facture por encima de esa cantidad, el gobierno va a poder disponer de ese dinero de manera absolutamente discrecional”, indicó el economista.

A su juicio, la inflación oficial cerrará el 2011 entre 25 y 28%, (más cercana a 28% que a la cifra inferior) pero la inflación real “que es la que sufren las amas de casa, la que sufren los hogares venezolanos será mucho mayor porque los productos de la cesta básica que afectan a los hogares de menos ingresos son precisamente los que tienen mayor nivel de precios”.

Acotó que los controles de precios que se han aplicado históricamente en todo el mundo “lo único que han provocado es distorsión, corrupción, escasez y malestar para la población”.