Los precios de los alimentos en el mundo se mantuvieron estables en agosto, después de haber subido un 6% en julio a causa del alza del maíz en Estados Unidos, anunció este jueves la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
"El índice de los precios de los alimentos se mantuvo relativamente estable", indicó David Hallam, director de la División Comercio y Mercado de la FAO en una rueda de prensa en Roma.
Este índice se sitúa 25 puntos por debajo de su récord de febrero de 2011 (entonces de 238 puntos), después de haber registrado un salto de 12 puntos entre junio y julio.
El índice de precios alimenticios, calculado sobre la base de una canasta de productos, da una idea sobre la estabilidad de los precios de los cereales o las oleaginosas, así como también sobre la brusca caída de los precios del azúcar "compensando el aumento de la carne y los productos lácteos", explicó la FAO.
El índice del precio de los cereales se situó "cerca de los 260 puntos", el mismo nivel que en julio, añadió Hallam. El alza moderada del trigo y del arroz, "del orden del 0,2%" en el caso de este último, contrarrestaron la del maíz.
"Es un dato tranquilizador", reconoció el director general de la FAO, Jo´se Grazaiano da Silva, que pidió no obstante "mantener la vigilancia porque sólo estamos al inicio de la estación" y "la demanda sigue siendo fuerte" en un contexto en donde la producción anual se contrae.
Las últimas previsiones de la FAO anunciadas el jueves sobre la producción cerealera mundial se sitúa en 2.295 millones de toneladas, una disminución de 52 millones de toneladas (2,2%) con respecto al récord de 2011.
"Este pronóstico es un 4% menos de los estimado en el informe anterior de la FAO en julio, debido principalmente al empeoramiento de las perspectivas de producción de maíz en Estados Unidos a causa de una sequía grave y generalizada", según la organización.
Las fuertes lluvias que cayeron en las zonas de Estados Unidos más afectadas por la sequía "y el anuncio de que Rusia no impondría restricciones a la exportación" hicieron bajar el nivel de los precios, estimó la FAO.
"Las noticias son buenas, pero la situación sigue siendo preocupante y numerosos países de Africa siguen siendo vulnerables, así como en Medio Oriente y en América Central", indicó Laurent Thomas, director de la División de Operaciones de Emergencia de la FAO.
"Vamos a continuar vigilando la situación y estaremos listos a intervenir con planes de emergencia, en caso en que la situación se deteriore", advirtió.
AFP
